Carchenses buscan un cupo en las universidades

Proceso. Al término de los exámenes se entregó a cada estudiante un documento impreso en el que constarán sus respuestas correctas e incorrectas.
Proceso. Al término de los exámenes se entregó a cada estudiante un documento impreso en el que constarán sus respuestas correctas e incorrectas.

En San Gabriel, 72 estudiantes del bachillerato intensivo fueron parte de la evaluación ‘Ser Bachiller’.

Redacciòn SAN GABRIEL.

Este fin de semana, en Carchi 1.323 estudiantes fueron convocados para rendir la prueba ‘Ser Bachiller’, 218 escolares, y 1.110 no escolares (sobre edad).

El Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineval) envió a los docentes aplicadores, que fueron los encargados de tomar la prueba en las distintas instituciones de la provincia.

La prueba ‘Ser Bachiller’ permite a los estudiantes de tercer año de bachillerato graduarse y postular por un cupo a las instituciones de educación superior, a través de un solo proceso.

Mientras que a los bachilleres graduados en años anteriores les brinda la posibilidad de postular por un cupo para acceder a una universidad, escuela politécnica o instituto técnico y tecnológico de su elección.

Bachillerato intensivo

En la Unidad Educativa José Julián Andrade de San Gabriel por primera vez rindieron las pruebas ‘Ser Bachiller’ 72 alumnos del bachillerato intensivo, que acogió a estudiantes que no lograron culminar sus estudios secundarios en la edad establecida.

Luis Chamorro, rector del establecimiento, explicó que se trata de una oportunidad que creó el Gobierno Nacional para aquellos alumnos que, a pesar de su edad, decidieron terminar el bachillerato a través de esta propuesta.

Estos estudiantes cursaban los últimos años en horario nocturno, constituyéndose en un gran esfuerzo y mérito, como reconoce Chamorro.

Kevin Bastidas, uno de los alumnos que se presentó a rendir el examen, comentó que alternó sus actividades laborales con los estudios.

En diciembre del año anterior culminó toda la fase de estudios, ahora espera los resultados de la prueba ‘Ser Bachiller’, que rindieron el pasado jueves en la mañana para incorporarse como bachilleres del Ecuador.

Los educandos de este proceso tuvieron algunas situaciones de vulnerabilidad, económicas, hogareñas o sociales que no les permitió continuar regularmente su educación y terminar el bachillerato a los 17 o 18 años, comenta Chamorro.

También existen alumnos que cuentan con sus trabajos, pero que tienen la esperanza que preparándose lograrán escalar en las dependencias donde laboran. La prueba además les permitirán con el puntaje acceder a las universidades estatales y definir la carrera que estudiarán.

Chamorro es optimista y adelanta que no descartan que de este colectivo pueda salir un bachiller al Grupo de Alto Rendimiento (GAR), ya que recibieron una malla similar a los chicos de educación regular.

“Ellos tienen la misma capacidad, las mismas aptitudes, el mismo pensamiento para seguir la universidad y convertirse en excelentes profesionales.”, agrega Chamorro.

Un solo estudiante no rindió, se desconoce las razones.

A pesar de que la prueba dijeron que fue “durísima”, los 70 futuros bachilleres salieron ilusionados a la espera de aplicar y hacer realidad el nuevo reto que es obtener un título profesional.

Sin embargo, una vez que han superado estos problemas optaron por retomar sus estudios y muchos ahora quieren continuar cursando la universidad, según señala la autoridad educativa. Muchos son del sector rural.

TOME NOTA
El proceso evalúa las aptitudes y destrezas de los postulantes en cinco campos: aptitud abstracta, dominio matemático, dominio lingüístico, dominio social y dominio científico.Steffi Andrade, quien logró un puntaje superior a los ocho puntos, dice que aspira seguir enfermería y está optimista. Ella considera que en la actualidad es necesario uno o dos títulos profesionales para enrolarse laboralmente.

En este grupo que se incorporará en las próximas semanas existen estudiantes de 60 años, que son abuelos y que tienen el interés de superarse e integrarse profesionalmente en el futuro al aparato productivo del país.

Reconocen que en un principio fue difícil cogerle el ritmo al sistema de estudios, pero una vez que están aptos sueñan con continuar sus estudios superiores en las universidades locales o a través de la modalidad a distancia. (CMRV)