Deslave en la Línea Roja acaba con 18 mil truchas

Afectación. La afectación en la línea de conducción de agua provocó que miles de truchas mueran.
Afectación. La afectación en la línea de conducción de agua provocó que miles de truchas mueran.

SAN GABRIEL

Un deslave que se registró en la Línea Roja, en la parroquia Fernández Salvador, en el cantón Montúfar destruyó la tubería de conducción de agua que alimenta a las piscinas piscícolas de la Asociación Comunitaria “Ceja de Montaña”.

La obstrucción del caudal que sustentaba a las gigantes albercas de truchas acabó con 18 mil ejemplares, indicó Santiago Chamorro, presidente de esta organización campesina, que viene apuntando desde años atrás al turismo comunitario.

Chamorro totalmente desecho comentó que esta iniciativa nació hace cinco años. Actualmente cuenta con infraestructura propia, en la que hace un lustro fueron sembrados 10 mil alevines, entregados por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

Desde hace tres años ya venían comercializando los peces y en el lugar se ofertaba además pesca deportiva a los turistas y visitantes. Fernando Chulde, técnico del MAG calificó como una catástrofe al suceso.

“Es lamentable porque se trata de gente emprendedora y humilde que con base a la constancia, organización y unidad, vienen logrando posicionar este proyecto eco-turístico en nuestro cantón”, comentó.

Pérdidas

Se estima que las pérdidas ascienden a 10 mil dólares, recursos que deben ser reinvertidos para rehabilitar esta iniciativa económica rural, que dice Chamorro, no la van a dejar morir, razón por la que están demandando ayuda de las instituciones públicas y privadas.

El dirigente cuenta que el siniestro se presentó en la madrugada, cuando descansaban, horario que no permitió percatarse sobre el deslizamiento y la afectación. “Quizás fue a las 03:00, hora en la que se cortó el suministro del líquido».

DATO
Aproximadamente 10 mil dólares se requiere para habilitar la producción y seis meses para reiniciar el programa de comercialización.

Con el paso de las horas los estanques se fueron vaciando (piscinas) o desaguando, provocando la múltiple muerte de las especies. Señala que cuando se percató, con asombro constató que había sido diezmado el 90 por ciento de la población piscícola.

“Apenas logramos rescatar unas dos mil truchas de tamaños pequeños”, sostiene otro de los socios. Afirma que el golpe ha sido duro, pero que no han perdido la fe.

Los gobiernos locales (Prefectura, Municipio de Montúfar y Gobierno Parroquial) han aportado a esta iniciativa, que tiene previsto además construir una cabaña para receptar turismo comunitario.

Las obras del sitio de hospedaje se iniciaron hace poco, ahora tendrán que esperar, porque algunos recursos fueron invertidos para enfrentar y superar la emergencia provocada por el incidente.

Se requiere de aproximadamente 10 mil dólares para habilitar la producción y seis meses para reiniciar el programa de comercialización. Chulde sostiene que el rubro de alimentación; es decir, la adquisición del balanceado no puede esperar y es urgente por el momento. (CMRV)