Fugas, persecución y capturas deja operativo policial en el norte de Quito

DETENCIÓN. Los implicados se trasladaban en este taxi, según las autoridades.
DETENCIÓN. Los implicados se trasladaban en este taxi, según las autoridades.

La Policía atrapó a dos de cinco presuntos asaltantes durante una persecución en el norte de la ciudad.

Utilizando una pistola de juguete, una banda de asaltantes se habría apoderado de al menos ocho teléfonos celulares que, presuntamente, arrebataron a transeúntes en el norte de Quito.

Dos de cinco sospechosos fueron detenidos durante una persecución policial que se extendió por cuatro barrios residenciales. Los implicados fugaban en un taxi amarillo cuya procedencia es investigada por las autoridades.

La captura de los procesados se dio gracias a que una de las víctimas llamó al ECU-911, luego de que sufrió un asalto en las avenidas Mañosca y Mariscal Sucre (Occidental).

La mujer entregó a la Policía las características del carro desde donde se bajaron sus victimarios. Los uniformados fueron en búsqueda del automóvil amarillo patrullando por la calle Marcos Joffre y la avenida Brasil. Sabían que los antisociales no podían estar lejos, pues no pasó mucho tiempo desde que se perpetró el robo hasta que iniciaron el operativo.

Persecución
Finalmente, el vehículo en que se movilizaban los presuntos antisociales fue identificado cuando atravesaba por la calle Nicolás López. La patrulla se aproximó y desde el parlante un agente pidió al conductor que se detenga.
La respuesta que obtuvo el uniformado fue el aumento de velocidad del taxi. Los implicados intentaban deshacerse de sus captores haciendo peligrosas maniobras evasivas que arriesgaban la integridad de peatones y conductores.

El seguimiento se hizo por el sector de La Concepción, Andalucía, Mariscal Sucre y Cotocollao. Los presuntos delincuentes se dieron cuenta que salir bien librados a bordo del taxi era imposible y decidieron abandonar el automotor y seguir escapando a pie.

Capturas y fugas
Para despistar a los uniformados, todos tomaron rutas distintas. Uno de los implicados, identificado como Pepe T., de 19 años, no alcanzó a correr ni cinco metros y fue capturado cerca del taxi.

Otro sospechoso intentó esconderse en el baño de una panadería de las calles San Francisco de Rumihurco y La Zagalita. La Policía encontró a David G., también de 19 años, sentado en el inodoro y en silencio para no ser descubierto. Él tenía en su poder nueve cartuchos calibre nueve milímetros que fueron entregados a Criminalística.

La Policía, además, revisó el vehículo abandonado y encontró una mochila con los ocho teléfonos de alta gama. Los equipos fueron usados para contactar a dos de las víctimas, quienes reconocieron a los sujetos como los presuntos asaltantes. (FLC)