Recibieron sentencia por traficar heroína

DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.
DETENIDOS. Los sospechosos, durante la espera para la diligencia a la que fueron convocados en la Corte Superior de Justicia de Carchi, en la presente semana.

Redacción TULCÁN

Alfonso Sigfredo Velásquez Intriago y Juan Diego Yela Montalvo recibieron 17 años y cuatro meses de cárcel, tras haber sido determinados como responsables de traficar miles de dosis de droga, ‘encaletadas’ dentro de un vehículo en el que se movilizaban.

Juzgamiento

Los procesados llegaron a la sala de audiencias de la Corte Superior de Justicia de Carchi escoltados por celadores penitenciarios.

En nerviosa actitud, los hombres esperaban expectantes el resultado de la diligencia. Y es que, dentro del proceso, ninguno admitió la responsabilidad de la infracción de manera directa.

Sin embargo, cuando se hizo el hallazgo de la evidencia, el pasado 30 de abril de este año, ambos fueron encontrados en el carro, por lo que, para los jurisconsultos, la responsabilidad en el ilícito era compartida, siendo finalmente condenados.

El ilícito

Dentro de la diligencia, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi, que tomaron procedimiento en el ilegal hallazgo, refirieron que aquella tarde los ciudadanos viajaban en un auto, marca Nissan Sentra, color crema, de placa PYY – 0577.

Detallaron que al llegar al control sur de Tulcán, les obligaron a detener la marcha para ser sometidos a un control de rigor. Los policías identificaron a Alfonso como conductor del vehículo.

En la requisa, los uniformados notaron que en uno de los filtros de aire del vehículo, había cierta manipulación que llamó su atención.

Al destaparlo, observaron varios envoltorios, que tenían cápsulas de látex, a las que les realizaron incisiones, brotando una sustancia café.

Ese contenido fue sometido a las pruebas preliminares de campo, que arrojaron positivo para heroína, sumando un total de 2.999 gramos de la ilícita sustancia, almacenada en 303 cápsulas.

Con este hallazgo, los sujetos fueron inmediatamente privados de su libertad.

Encontraron más droga

Seis días después, es decir el 05 de mayo de 2019, una nueva inspección en el automotor permitió que los policías encontraran más estupefaciente.

Esta vez, dieron con droga que estaba escondida en el asiento del conductor, con un total de 181 cápsulas, con un peso neto de 1.810 gramos.

Esta nueva incautación sumó un total de 4.809 gramos de toda la droga que los sospechosos pretendían traficar.

Se defendieron

En su declaración, Alfonso sostuvo que un día antes de la detención habría sido contratado por Juan Diego, para transportar un vehículo de Rumichaca a Guayaquil, pues ya había sido vendido y tenía que ser entregado.

Una suma de dinero había de por medio, por lo que dijo que aceptó el ‘trabajo’.

Por su parte, Juan Diego sostuvo que conoció a Alfonso en Guayaquil, pues él laboraba en el taxi de su padre y le realizaba carreras.

Entre el uno y el otro ciudadano, ninguno admitió haber tenido responsabilidad directa sobre la propiedad del estupefaciente, sin embargo, ante la mirada de la justicia, ambos son culpables y consientes del delito que estaban cometiendo, por lo que terminaron tras las rejas por largo tiempo.

Los procesados se encuentran purgando su condena en el centro penitenciario mixto de Tulcán.

El carro en el que se cometió el delito fue incautado y se encuentra retenido en los patios policiales.

Con esta intervención, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi impidieron el paso de la droga, que tenía como destino el tráfico internacional. (MAGC)

Redacción TULCÁN

Alfonso Sigfredo Velásquez Intriago y Juan Diego Yela Montalvo recibieron 17 años y cuatro meses de cárcel, tras haber sido determinados como responsables de traficar miles de dosis de droga, ‘encaletadas’ dentro de un vehículo en el que se movilizaban.

Juzgamiento

Los procesados llegaron a la sala de audiencias de la Corte Superior de Justicia de Carchi escoltados por celadores penitenciarios.

En nerviosa actitud, los hombres esperaban expectantes el resultado de la diligencia. Y es que, dentro del proceso, ninguno admitió la responsabilidad de la infracción de manera directa.

Sin embargo, cuando se hizo el hallazgo de la evidencia, el pasado 30 de abril de este año, ambos fueron encontrados en el carro, por lo que, para los jurisconsultos, la responsabilidad en el ilícito era compartida, siendo finalmente condenados.

El ilícito

Dentro de la diligencia, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi, que tomaron procedimiento en el ilegal hallazgo, refirieron que aquella tarde los ciudadanos viajaban en un auto, marca Nissan Sentra, color crema, de placa PYY – 0577.

Detallaron que al llegar al control sur de Tulcán, les obligaron a detener la marcha para ser sometidos a un control de rigor. Los policías identificaron a Alfonso como conductor del vehículo.

En la requisa, los uniformados notaron que en uno de los filtros de aire del vehículo, había cierta manipulación que llamó su atención.

Al destaparlo, observaron varios envoltorios, que tenían cápsulas de látex, a las que les realizaron incisiones, brotando una sustancia café.

Ese contenido fue sometido a las pruebas preliminares de campo, que arrojaron positivo para heroína, sumando un total de 2.999 gramos de la ilícita sustancia, almacenada en 303 cápsulas.

Con este hallazgo, los sujetos fueron inmediatamente privados de su libertad.

Encontraron más droga

Seis días después, es decir el 05 de mayo de 2019, una nueva inspección en el automotor permitió que los policías encontraran más estupefaciente.

Esta vez, dieron con droga que estaba escondida en el asiento del conductor, con un total de 181 cápsulas, con un peso neto de 1.810 gramos.

Esta nueva incautación sumó un total de 4.809 gramos de toda la droga que los sospechosos pretendían traficar.

Se defendieron

En su declaración, Alfonso sostuvo que un día antes de la detención habría sido contratado por Juan Diego, para transportar un vehículo de Rumichaca a Guayaquil, pues ya había sido vendido y tenía que ser entregado.

Una suma de dinero había de por medio, por lo que dijo que aceptó el ‘trabajo’.

Por su parte, Juan Diego sostuvo que conoció a Alfonso en Guayaquil, pues él laboraba en el taxi de su padre y le realizaba carreras.

Entre el uno y el otro ciudadano, ninguno admitió haber tenido responsabilidad directa sobre la propiedad del estupefaciente, sin embargo, ante la mirada de la justicia, ambos son culpables y consientes del delito que estaban cometiendo, por lo que terminaron tras las rejas por largo tiempo.

Los procesados se encuentran purgando su condena en el centro penitenciario mixto de Tulcán.

El carro en el que se cometió el delito fue incautado y se encuentra retenido en los patios policiales.

Con esta intervención, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi impidieron el paso de la droga, que tenía como destino el tráfico internacional. (MAGC)

Redacción TULCÁN

Alfonso Sigfredo Velásquez Intriago y Juan Diego Yela Montalvo recibieron 17 años y cuatro meses de cárcel, tras haber sido determinados como responsables de traficar miles de dosis de droga, ‘encaletadas’ dentro de un vehículo en el que se movilizaban.

Juzgamiento

Los procesados llegaron a la sala de audiencias de la Corte Superior de Justicia de Carchi escoltados por celadores penitenciarios.

En nerviosa actitud, los hombres esperaban expectantes el resultado de la diligencia. Y es que, dentro del proceso, ninguno admitió la responsabilidad de la infracción de manera directa.

Sin embargo, cuando se hizo el hallazgo de la evidencia, el pasado 30 de abril de este año, ambos fueron encontrados en el carro, por lo que, para los jurisconsultos, la responsabilidad en el ilícito era compartida, siendo finalmente condenados.

El ilícito

Dentro de la diligencia, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi, que tomaron procedimiento en el ilegal hallazgo, refirieron que aquella tarde los ciudadanos viajaban en un auto, marca Nissan Sentra, color crema, de placa PYY – 0577.

Detallaron que al llegar al control sur de Tulcán, les obligaron a detener la marcha para ser sometidos a un control de rigor. Los policías identificaron a Alfonso como conductor del vehículo.

En la requisa, los uniformados notaron que en uno de los filtros de aire del vehículo, había cierta manipulación que llamó su atención.

Al destaparlo, observaron varios envoltorios, que tenían cápsulas de látex, a las que les realizaron incisiones, brotando una sustancia café.

Ese contenido fue sometido a las pruebas preliminares de campo, que arrojaron positivo para heroína, sumando un total de 2.999 gramos de la ilícita sustancia, almacenada en 303 cápsulas.

Con este hallazgo, los sujetos fueron inmediatamente privados de su libertad.

Encontraron más droga

Seis días después, es decir el 05 de mayo de 2019, una nueva inspección en el automotor permitió que los policías encontraran más estupefaciente.

Esta vez, dieron con droga que estaba escondida en el asiento del conductor, con un total de 181 cápsulas, con un peso neto de 1.810 gramos.

Esta nueva incautación sumó un total de 4.809 gramos de toda la droga que los sospechosos pretendían traficar.

Se defendieron

En su declaración, Alfonso sostuvo que un día antes de la detención habría sido contratado por Juan Diego, para transportar un vehículo de Rumichaca a Guayaquil, pues ya había sido vendido y tenía que ser entregado.

Una suma de dinero había de por medio, por lo que dijo que aceptó el ‘trabajo’.

Por su parte, Juan Diego sostuvo que conoció a Alfonso en Guayaquil, pues él laboraba en el taxi de su padre y le realizaba carreras.

Entre el uno y el otro ciudadano, ninguno admitió haber tenido responsabilidad directa sobre la propiedad del estupefaciente, sin embargo, ante la mirada de la justicia, ambos son culpables y consientes del delito que estaban cometiendo, por lo que terminaron tras las rejas por largo tiempo.

Los procesados se encuentran purgando su condena en el centro penitenciario mixto de Tulcán.

El carro en el que se cometió el delito fue incautado y se encuentra retenido en los patios policiales.

Con esta intervención, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi impidieron el paso de la droga, que tenía como destino el tráfico internacional. (MAGC)

Redacción TULCÁN

Alfonso Sigfredo Velásquez Intriago y Juan Diego Yela Montalvo recibieron 17 años y cuatro meses de cárcel, tras haber sido determinados como responsables de traficar miles de dosis de droga, ‘encaletadas’ dentro de un vehículo en el que se movilizaban.

Juzgamiento

Los procesados llegaron a la sala de audiencias de la Corte Superior de Justicia de Carchi escoltados por celadores penitenciarios.

En nerviosa actitud, los hombres esperaban expectantes el resultado de la diligencia. Y es que, dentro del proceso, ninguno admitió la responsabilidad de la infracción de manera directa.

Sin embargo, cuando se hizo el hallazgo de la evidencia, el pasado 30 de abril de este año, ambos fueron encontrados en el carro, por lo que, para los jurisconsultos, la responsabilidad en el ilícito era compartida, siendo finalmente condenados.

El ilícito

Dentro de la diligencia, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi, que tomaron procedimiento en el ilegal hallazgo, refirieron que aquella tarde los ciudadanos viajaban en un auto, marca Nissan Sentra, color crema, de placa PYY – 0577.

Detallaron que al llegar al control sur de Tulcán, les obligaron a detener la marcha para ser sometidos a un control de rigor. Los policías identificaron a Alfonso como conductor del vehículo.

En la requisa, los uniformados notaron que en uno de los filtros de aire del vehículo, había cierta manipulación que llamó su atención.

Al destaparlo, observaron varios envoltorios, que tenían cápsulas de látex, a las que les realizaron incisiones, brotando una sustancia café.

Ese contenido fue sometido a las pruebas preliminares de campo, que arrojaron positivo para heroína, sumando un total de 2.999 gramos de la ilícita sustancia, almacenada en 303 cápsulas.

Con este hallazgo, los sujetos fueron inmediatamente privados de su libertad.

Encontraron más droga

Seis días después, es decir el 05 de mayo de 2019, una nueva inspección en el automotor permitió que los policías encontraran más estupefaciente.

Esta vez, dieron con droga que estaba escondida en el asiento del conductor, con un total de 181 cápsulas, con un peso neto de 1.810 gramos.

Esta nueva incautación sumó un total de 4.809 gramos de toda la droga que los sospechosos pretendían traficar.

Se defendieron

En su declaración, Alfonso sostuvo que un día antes de la detención habría sido contratado por Juan Diego, para transportar un vehículo de Rumichaca a Guayaquil, pues ya había sido vendido y tenía que ser entregado.

Una suma de dinero había de por medio, por lo que dijo que aceptó el ‘trabajo’.

Por su parte, Juan Diego sostuvo que conoció a Alfonso en Guayaquil, pues él laboraba en el taxi de su padre y le realizaba carreras.

Entre el uno y el otro ciudadano, ninguno admitió haber tenido responsabilidad directa sobre la propiedad del estupefaciente, sin embargo, ante la mirada de la justicia, ambos son culpables y consientes del delito que estaban cometiendo, por lo que terminaron tras las rejas por largo tiempo.

Los procesados se encuentran purgando su condena en el centro penitenciario mixto de Tulcán.

El carro en el que se cometió el delito fue incautado y se encuentra retenido en los patios policiales.

Con esta intervención, los policías de la Unidad Subzonal de Antinarcóticos de Carchi impidieron el paso de la droga, que tenía como destino el tráfico internacional. (MAGC)