14 personas son parte del grupo que contribuye al cuidado del ecosistema y buscan un ingreso para sus hogares.
La Asociación de Recicladores de Base Señor de la Paz (Asosepaz), es un grupo de personas que se dedicaban a reciclar la basura en botaderos y contenedores e iniciaron un proyecto para mejorar sus condiciones laborales y contribuir al medio ambiente.
Fabricio Guerrón, analista de Inclusión Económica y Movilidad Social, del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), explicó que uno de los objetivos es fortalecer las organizaciones de la economía popular y solidaria y fomentar la asociatividad.
Y un grupo de personas asociadas son los recicladores que decidieron unirse y esto generó un ingreso económico, más cobertura y mejor condición humana.
Asosepaz es parte de una red de recicladores a nivel nacional y tiene un convenio con el MIES Distrito Latacunga que capacita y entrega el material reciclado desde el distrito a estas personas.
Los miembros de la Asociación ahora son clasificadores puerta a puerta y esto permite a las familias generar conciencia del cuidado a la naturaleza y no poner todo lo desechable en un mismo contenedor.
María del Carmen Chasipanta, miembro de la asociación de reciclaje, dijo que es mucho mejor porque no es lo mismo estar en un botadero que golpeando las puertas de los hogares.
Las personas de Asosepaz entregan volantes en las casas con números de teléfono y con las rutas que siguen para el reciclaje, la persona los llama y retiran el plástico desde la casa.
Esta medida también aporta al tratamiento de la basura porque ellos recogen los desperdicios antes de que vayan al contenedor y al botadero.
La asociación entrega una funda azul y una verde para separar plástico y papel y luego las recogen, este servicio no está en toda la ciudad porque el presupuesto de la entidad no alcanza para comparar las fundas.
“Estamos terminando de redondear el centro de Latacunga comenzamos por la Sánchez de Orellana y ahora estamos en la calle Dos de Mayo”, expresó María del Carmen.
Después de recoger los desechos estos se almacenan en un centro de acopio en San Buenaventura y se venden a los centros grandes que luego lo entregan a empresas de Quito y Guayaquil que transforman el producto.
“Ellos no compran el reciclaje, lo recogen y ayudan al ambiente”, afirmó Guerrón.
Es importante que la ciudadanía no intente cobrarles por darles el material reciclado, puesto que esto es una ayuda para estas familias de escasos recursos, además se debe considerar que el kilo de plástico lo venden entre 8 y 10 centavos de dólar para esto deben recorrer el día entero y si una persona pide por una botella 10 centavos “es imposible”, destacó el Analista.
Al momento de recoger la basura muchas personas nos apoyan y nos dan ayuda, pero también hay reciclaje en la casa y esto a veces nos perjudica”, informó María del Carmen.
En total son 14 personas que se distribuyen sectores, además tienen una vestimenta adecuada color verde, azul y naranja con líneas reflexivas una gorra con el nombre de la asociación.
María del Carmen acotó que piensan expandirse a más zonas de la ciudad e iniciarán visitas en las ciudadelas para crear consciencia del reciclaje. (NA)