Cae banda de microtráfico que operaba al sur de Quito

EVIDENCIA. Esta fue la droga que la Policía encontró durante el operativo.
EVIDENCIA. Esta fue la droga que la Policía encontró durante el operativo.

Las autoridades realizaron allanamientos simultáneos en Quito, Sucumbíos, Ibarra y Esmeraldas.

Una estructura narcodelictiva que operaba en cuatro ciudades tuvo su fin. La Fiscalía y agentes de la Dirección Nacional de Antinarcóticos de la Policía ejecutaron allanamientos simultáneos en Quito, Sucumbíos, Ibarra y Esmeraldas. La mayoría de intervenciones se efectuaron en la capital, centro de operaciones de esta red dedicada a tráfico de sustancias estupefacientes para el consumo interno.

Luego de seis meses de investigaciones, personal de la Unidad Contra el Tráfico para el Consumo Interno (Uctci) capturó a 25 presuntos integrantes de esta red narcodelictiva. Entre los detenidos se encuentra la supuesta líder, identificada como Edita P.

Las pesquisas policiales revelaron que la mujer tenía nexos en las fronteras para el paso de la droga. Ella utilizaba a personas de la tercera edad y a menores para que transportaran la mercancía en buses interprovinciales.

La pasta base de cocaína ingresaba desde Colombia por la frontera de Sucumbíos, también lo hacía desde Perú. La marihuana entraba por Esmeraldas.

‘Duros’ en el sur
La Policía identificó los barrios donde operaba esta organización. Ellos tenían controlado el ‘negocio’ de casi todo el sur de Quito. Sus tentáculos alcanzaban a la ciudadela Ibarra, Valle del Sur, El Pintado, Chillogallo, El Tránsito, Lucha de los Pobres, Martha Bucaram, Santa Rosa, La Magdalena y La Colmena.

25
sospechosos fueron puestos a órdenes de las autoridades de Justicia. Edita P. incluso utilizaba a sus hijos y sobrinos para distribuir las sustancias sujetas a fiscalización. Dentro de su organigrama delictivo también figuraba su exnuera, quien mantenía contactos con una ciudadana colombiana que le proporcionaba la droga. (FLC)

Las evidencias
° Durante los allanamientos, la Policía incautó aproximadamente 50 kilos de marihuana, 970 gramos de cocaína, dos armas de fuego, 5.000 dólares en efectivo que presuntamente fueron obtenidos con la venta de droga. Se hallaron además dos armas de fuego, dos vehículos que serían parte de la logística para el transporte de la sustancia y teléfonos celulares con los que al parecer se comunicaban los expendedores con los consumidores.