Banda asaltaba a clientes de burdeles en Quito

Entre los procesados hay un menor que fue aislado.
Entre los procesados hay un menor que fue aislado.

Las víctimas iban del placer a la amargura luego de sufrir asaltos tras abandonar los centros de tolerancia en estado etílico.

Un grupo de delincuentes tenía en zozobra a los noctámbulos que frecuentaban burdeles situados en la zona industrial del norte de Quito. La Policía tardó casi tres meses en identificar a todos los miembros de la banda, incluido a su líder. Él designó roles a cada uno de los integrantes. Los ejecutores eran los encargados de perpetrar los asaltos, mientras que otros brindaban seguridad fungiendo de campaneros. Ellos alertaban si alguna patrulla se aproximaba.

El operativo que desarticuló la presunta organización delictiva arrancó aproximadamente a las 18:00 del último jueves y terminó cerca de las 22:00 de ese mismo día. Los agentes de la Subdirección de Investigaciones de Delitos contra la Propiedad (Sidpro–BAC) identificaron los puntos donde operaba esta agrupación. Los gendarmes obtuvieron autorización de los jueces para captar las actividades ilícitas de los sospechosos en videos. Las imágenes serán entregadas a las autoridades de Justicia para que funjan como prueba del delito.

El operativo
El teniente coronel Pablo Ramírez, jefe de la Sidpro–BAC, dijo que los antisociales operaban en los sectores del distrito La Delicia, principalmente en las afueras de los centros de tolerancia cercanos a la avenida Galo Plaza Lasso.

Explicó que existen cerca de 30 denuncias que motivaron el inicio de la investigación. Todos los perjudicados fueron hombres, quienes luego de abandonar los burdeles en estado etílico eran abordados por los implicados para sustraerles todas sus pertenencias.

Para cometer los robos se empleaban cuchillos y herramientas que simulaban ser armas de fuego, informó Ramírez.

En poder de los sospechosos, la Policía encontró ocho teléfonos celulares de alta gama, que presuntamente serían de víctimas recientes. Los equipos también fueron adjuntados entre las evidencias para que la Fiscalía los considere en la etapa de instrucción fiscal.

El uniformado explicó que se tomó las versiones a los perjudicados, quienes reconocieron a los los agresores.

“El delito por el que supuestamente se los investigará será el de robo a personas con modalidad de amenaza e intimidación”, dijo el uniformado. (FLC)