En las afueras de las unidades educativas hay decenas de peligros a los que los niños y jóvenes se exponen cada día.
Robos de celulares, secuestros, violaciones, atropellamientos o venta de sustancias estupefacientes, son algunos de los problemas que los niños y jóvenes pueden atravesar en las calles, y es por esto que en varios sectores de la provincia los padres se han organizado para evitar que estos peligros se acerquen a sus hijos.
Rina Tovar, rectora de la Unidad educativa La Inmaculada, manifestó que desde el comité de padres de familia, nació la idea de realizar vigilancia fuera de la institución en la entrada y salida de los estudiantes, “como autoridades apoyamos esta iniciativa pues nuestro deber es mantener a los menores a salvo”.
Las ‘brigadas’ como se ha denominado esta iniciativa consiste en que los padres de familia se turnan cada semana, dependiendo del paralelo y se colocan en la puerta, para ayudar a los menores y guiarlos mientras llegan sus padres o ingresan a la escuela.
Esteban Andrés Espinel, estudiante y presidente de la asociación estudiantil, comentó que los menores deben cuidar sus objetos personales y dialogarán con la Policía Nacional para que se impartan más charlas sobre los peligros a los que se exponen.
William Villalba, capitán de la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen), dijo que han llegado a las instituciones educativas con varias temáticas en prevención de consumo del alcohol y de drogas, puesto que estos problemas se han incrementado con fuerza.
El uniformado explicó que el consumo de sustancias estupefacientes ha incrementado y la edad en la que empiezan el consumo es a los 12 años.
La sustancia que más se consume en los colegios es la marihuana y las bebidas alcohólicas, “muchos jóvenes buscan que llegue el viernes y en lugar de ir a sus casas se van a emborrachar y luego tienen fuertes riñas callejeras”.
Para esto recordó a los propietarios de tiendas, cantinas, bares y karaoques que el expendio de bebidas alcohólicas a menores está prohibida, “muchos no hacen caso y con tal de ganar dinero perjudican a la juventud”.
Otro de los riesgos a los que están expuestos, es el uso de la tecnología, puesto que según Villalba los lugares donde más robos de celulares, tablets, laptops, calculadores y reproductores de música, son las calles aledañas a las instituciones educativas.
Estudios de la Fundación Kaiser y de ‘Active Healthy Kids’, Canadá, advierten que
Con el excesivo uso de redes sociales como Instagram y Facebook los estudiantes pueden ser víctimas de la delincuencia y el abuso a menores.
“Los jóvenes exponen su vida en las redes sociales y con esto es fácil reclutar o captar a una persona sin dejar huellas”, acotó Villalba.
Por ello recomendó estar pendientes de los movimientos de sus hijos en redes o no permitir su uso.
Alertas para prevenir
En Salcedo los padres de familia del sector de San Miguel también se han organizado con los niños, para que puedan dar aviso en las calles, en caso de ser victimas de un secuestro o persecución de algún tipo.
Para esto han entregado ‘pitos comunitarios’ y al momento que los niños están siendo llevados por alguien deben tocarlo con fuerza, así la ciudadanía podrá actuar de inmediato. (NA)