Hoy quiero hablar

POR: ALEJANDRO FABARA TORRES

Pensar una ciudad sin la colaboración de sus habitantes ya no es una opción. Hoy quiero hablar de una ciudad abierta, cosmopolita, multicultural, que requiere de liderazgos tolerantes para sociedades con cruces de lenguas, de orígenes, de procedencias. Un liderazgo capaz de entender que los desafíos de una ciudad no se resuelven solamente desde la Administración, sino que requieren el impulso de una ciudad al servicio de la ciudadanía que la habita, visita o transita.

Hoy quiero hablar de una ciudad más humana. Es momento de volver al principio según el cual la ciudad es de los ciudadanos. Debemos recuperar el espacio público como paso obligatorio a la democratización y la humanización de la vida en las ciudades. ¿Qué estamos esperando para dar ese paso a la participación en lo público? Ocupo el espacio, lo recupero, lo hago mío. Me hago partícipe de todo lo que ocurre en mi ciudad. Esa ciudad que empieza en nuestra calle, en nuestro mercado, en nuestro barrio.

Hoy quiero hablar de liderazgo. No se puede gestionar una ciudad desde los viejos mapas. El poder político formal tiene su límite en el territorio. El nuevo poder político real es aquel capaz de actuar sobre nuevas cartografías que no entienden de metros cuadrados sino de relaciones exponenciales. Un líder que piensa en el futuro debe tener poder político más allá, y por encima, de sus competencias reguladas y recursos. Pero debe entender que nadie se lo va a otorgar, debe ganarlo.

Hoy quiero hablar de urbanismo. El planteamiento urbanístico y su actividad económica no es posible desde la superioridad tecnocrática y la lógica numérica simplista. Las ciudades del futuro serán inclusivas, sostenibles, resilientes o no serán. La ciudad no es un elemento abstracto que reformar, es un conjunto de ciudadanos que sienten, orientan y deciden cuáles son las decisiones que hay que tomar.

Hoy quiero hablar de sostenibilidad. Caminemos la ciudad, porque andando definimos la relación y nuestra actitud con ella. Caminar para descubrir y liberarse. Caminar es la última revolución y resistencia cívicas.

Hoy quiero hablar de ciudadanía. Para generar más ciudad, pasan por ampliar y promover más ciudadanía. La ciudad no se piensa solo desde el código postal, sino desde su código digital. La ciudad debajo de los adoquines. Ciudades que evolucionan, se transforman, y que, hasta un punto, son impredecibles. Ciudades humanas que necesitan de tecnología adaptada a sus necesidades.

Hoy quiero hablar del pasado. Recordamos 198 de una gesta independentista en la que latacungueños dieron su vida por la libertad de su gente. Hoy quiero hablar del futuro. Para 2030 más de medio billón de personas tendrán 65 años o más. La población envejece y exige que las ciudades adopten estrategias inclusivas para atender sus necesidades de movilidad, vivienda, atención, recreación, etc.

Hoy quiero hablar del presente. Apoyar y promover propuestas que no nos han defendido como ciudad, que nos han fallado y nos quedan debiendo es irresponsable. No confíen en quienes quieren dar un rol pasivo a los ciudadanos, no confíen en quienes solo nos ven como estadísticas en una encuesta. Es hora de confiar en quienes buscan aprovechar nuestra condición de ciudadanos inteligentes y nos involucran en un proceso compartido de diseño de la ciudad.

Hoy quiero hablar de la ciudad que sueño. Hoy quiero hablar de Latacunga, este lindo rincón mi patria, tierrita donde nací.