LUIS REINOSO GARZÓN
Los especialistas afirman que existe un millón y medio de especies de hongos y que fueron los primeros organismos en colonizar la tierra hace 1.300 millones de años y ahora conocemos que la mayoría son muy útiles y serviciales; ayudan en la producción de humus, en la alimentación, en la medicina humana, en el combate de enfermedades de las plantas, además pueden salvar al mundo, curando enfermedades como la viruela, gripe, tuberculosis, podría prevenir el cáncer y las alergias.
La agricultura es la más beneficiada, con la utilización de los hongos, en la fabricación de pesticidas para el control de insectos e invertebrados dañinos que podrían ayudar a controlar hasta 200.000 especies de insectos, sin dañar el ambiente.
El mecanismo de eliminación de insectos consiste, en que resulta efectivo para las plagas que ingerían el micelio, o sea los filamentos que constituyen la parte vegetativa del hongo que se reproduce en su interior, generando sustancias letales para el anfitrión; los cuerpos de los insectos muertos colonizados por el hongo se convierten en emisores de esporas que previenen la llegada de nuevas invasiones. Ventajosamente no resulta tóxico para humanos, peces, polinizadores, aves.
Este descubrimiento es vital, en estos momentos cruciales para Planeta, en donde 700 especies de abejas americanas se encuentran en la lista de especies en peligro de extinción; por lo tanto, esta tecnología tiene el potencial para revolucionar la agricultura y la forma para producir alimentos, mucho más saludables para el ambiente y la población. En nuestro país ya se ha utilizado algunos hongos en el tratamiento biológico para las plagas y enfermedades en los cultivos, como trichoderma y otros, pero es necesario concientizar a los agricultores, consumidores y organismos de apoyo para cultivar productos limpios y saludables con este tratamiento.