Carreras tecnológicas seducen a los jóvenes

Acercamiento. Las ferias de orientación son una guía que permite aclarar el panorama académico que tienen los jóvenes.
Acercamiento. Las ferias de orientación son una guía que permite aclarar el panorama académico que tienen los jóvenes.

Decidir qué estudiar y dónde hacerlo son dos de los dilemas más comunes que enfrentan los jóvenes, tras culminar su educación secundaria.

El escenario se torna más complejo cuando se toma en cuenta que en Quito hay alrededor de 87 centros de educación superior (universidades e institutos), entre los que se puede escoger y que tienen una amplia gama de carreras, con distintos tiempos de estudios. Este último factor, sin embargo, seduce a quienes buscan carreras técnicas.

Esto porque tras la reforma de la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), aprobada en mayo de 2018, considera a los estudios tecnológicos como titulación de tercer nivel.

“Son opciones convenientes, porque son más cortas y en algún punto creo que son mucho más prácticas que teóricas. Por menos tiempo se puede aprender bastante y optar por una maestría en un futuro”, explica Jaime Pasquel.

El joven de 17 años tiene planificado estudiar una tecnología en gastronomía ecuatoriana y de fusión tras culminar su último año de estudios secundarios en el colegio Darío Figueroa Larco, ubicado en Salngolquí.

Para su educación de tercer nivel ha considerado ingresar en alguno de los institutos especializados en gastronomía de la ciudad.

Para decidirse por esta vía, a Pasquel le ayudó la información que le dieron durante una feria de orientación vocacional a la que asistió. Es en ese espacio, el futuro bachiller encontró la carrera que se acopla a sus gustos y sueños. “Siempre me gustó la cocina, pensé en estudiar gastronomía, pero no es una carrera común en las universidades del país. Estaba considerando seguir administración de empresas por consejo de mi familia, pero ir a la feria me ayudó a ver nuevas opciones que me permiten seguir con mi sueño”.

Él no es el único que ha optado por este tipo de opciones, que son más convenientes e interesantes.

Lizbeth Pérez, de 20 años, también eligió una carrera técnica. En su caso se ilusionó con Enfermería. Ella cuenta que, antes de tomar la decisión de ingresar a un instituto antes que a una universidad, rindió el examen ‘Ser Bachiller’, pues inicialmente quería estudiar medicina en la Universidad Central del Ecuador. Los puntajes que alcanzó fueron insuficientes para obtener un cupo en ese centro de estudios.

“Busqué algo parecido en institutos para considerar las opciones. Al final decidí ingresar a una tecnología, porque tampoco iba a quedarme sin estudiar. Mi siguiente paso es sacar una licenciatura”.

ESTUDIOS. Uno de los atractivos de los campos técnicos es el tiempo de duración de las carreras.
ESTUDIOS. Uno de los atractivos de los campos técnicos es el tiempo de duración de las carreras.

Aumento de la demanda
Alternativas como estas se también se han convertido en el ‘comodín’ de otros jóvenes, que ya cuentan con algún título y optan por expandir sus conocimientos para ampliar su campo laboral con una carrera corta.

Una de las personas que tomó esta decisión es Ana Rodríguez, de 27 años. Tras titularse en Ingeniería en Comercio Exterior, hace tres años, optó por estudiar tecnología en Enfermería. Esto lo hizo debido a que “no encontré muchas oportunidades laborales y una carrera corta adicional me permite aplicar a otro tipo de trabajos”.

EL DATO
Entre dos a tres años de duración tiene una tecnología. La joven cuenta que tiene varios excompañeros que también decidieron aplicar a una tecnología después de su primera titulación.

Esta tendencia ha hecho que la demanda de carreras tecnológicas y técnicas aumente en el país.

Galo Bolagay, director de la carrera de Diseño y Mantenimiento de redes del Instituto Tecnológico Superior Libertad, cuenta que la cantidad de alumnos que buscan estas opciones ha aumentado en 30% o 40% en su institución. “La tendencia se ha replicado en otros centros de instrucción superior de este tipo”.

Esto, según el educador, se debe a que estas carreras son prácticas. “El estudiante se especializa y puede salir del instituto con conocimientos aplicados, listo para la vida laboral”.

Oferta
Entre de las carreras tecnológicas que más están despuntado destacan: Entrenamiento deportivo, Enfermería, Podología, Visitador médico, Mecánica dental, Mantenimiento y electrónica, Diseño y mantenimiento de redes, Telecomunicaciones, Gastronomía y Hotelería. Esto, sin embargo, no ha coartado el surgimiento de otras especialidades.

“Se han generado nuevas carreras innovadoras que no existían en el país a nivel profesional. Es el caso de Cosmetología o Estética Integral”, dice Ana María Ramírez, directora de la carrera de Cosmetología del Instituto Tecnológico Sudamericano.

En esa especialidad se imparte Anatomía, Fisiología, Nutrición, Electroestética, Maquillaje profesional, Masaje terapéutico, entre otras materias. Esto se complementa con clases administrativas y gerenciales “para formar futuras empresarias o emprendedoras”, agrega.

Al igual que en las universidades, la oferta académica de los institutos es muy variada. Entre las especialidades que abarcan se encuentra Diseño de modas, Arte culinario en servicios y administración, Diseño gráfico multimedia, Administración de bares y restaurantes, entre otras carreras.

Bolagay hace un llamado a los jóvenes que salen del colegio y a los que aún no entran al sistema de educación superior a considerar las tecnologías como una forma de profesionalizarse “de una manera más práctica”. (ECV)