Un padre cuyo lema es la solidaridad

Familia. Antonio Vaca siempre busca dar un poco de lo que tiene a los demás.
Familia. Antonio Vaca siempre busca dar un poco de lo que tiene a los demás.

Antonio Vaca es un empresario y padre Latacungueño de 53 años que se ha destacado a lo largo de su vida por su trabajo, solidaridad y el cariño que entrega a sus dos hijos.

Cuando Antonio se convirtió en padre por primera vez lo hizo con la convicción de entregar todo el amor a una persona que requería de su cuidado y apoyo; es así que adoptó a su primer hijo, Luis Alberto quien tiene 32 años y siempre lha recibido su atención y cariño, “es un lazo único el que nos ata y es una de las mayores bendiciones”.

Con los años llegó su segunda hija Jelissa Roxane y la primera biológica, la que en los últimos 21 años ha completado su vida y felicidad.

Con una oportunidad de salir adelante Antonio viajó junto con su familia a los Estados Unidos donde formó una empresa, sin embargo nunca ha dejado atrás su tierra natal, por esto fundó la casa de Papá Noel, la que funciona en el barrio El Loreto y cada año se llena de luces, juguetes y caramelos para que los niños de todas partes de la ciudad vengan a disfrutar la Navidad.

En este espacio también se comparte con los niños que no tienen recursos económicos y en ocasiones su núcleo familiar no es un apoyo para ellos.

Por esto a pesar de que él no está en la ciudad, considera que siempre es bueno compartir lo que se tiene con los demás, “les he inculcado a mis hijos el valor de la solidaridad porque el compartir nos hace mejores personas”.

Asegura que con los años ha podido entregar un poco del amor que tienen para todas las personas que visitan su casa, “me gusta que la gente llegue a mi casa, conversar y pasar un momento de alegría”.

Asegura que el ser padre es la experiencia más hermosa que le pudo regalar la vida “incluye responsabilidad y amor constante”.

Destacó que lo más difícil de ser padre es el aprendizaje diario porque no hay un manual para ser un padre y todos los hijos son diferentes mundos y realidades, “yo tengo dos hijos y vivo en el exterior pero cuando llego de visita a mi Latacunga mis sobrinos me reciben como si fuera su padre y yo los quiero como si fueran mis hijos”.

En una palabra que describa su paternidad Antonio dice que es amigo, ya que siempre ha tratado de estar cerca de sus hijos como su confidente, para ayudarlos y guiarlos, “la familia es la empresa más importante del mundo uno debe actualizarse en la tecnología y estar listo para responder sus inquietudes en un mundo que cambia constantemente”.

El principal consejo que Antonio da a su hijos es que amen a Dios sobre todas las cosas, que no tengan actos de los que puedan arrepentirse y que valoren lo que tienen ya que no todas las personas tienen las mismas oportunidades, “creo que no hay que darles todo a los hijos y ellos deben vivir sus propias experiencias y aprender que las cosas cuestan”.

Para este empresario el merecer el titulo de padre es algo que se debe ganar con esfuerzo, “muchos solamente son donadores de esperma, pero padre es el que se trasnocha, acompaña, aconseja, se preocupa y acepta las decisiones de sus hijos”. (NA)