Policía de Cotopaxi trabaja en la calificación de los daños

Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.
Labor. El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi.

Los integrantes del comando de policía en Cotopaxi trabajan en la cuantificación de los bienes afectados durante las movilizaciones, en la provincia no se registró la destrucción total de patrulleros pero sí la rotura de parabrisas, retrovisores, por lo que están en las verificaciones.

El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi, manifestó que deben hacer una retroalimentación a los procesos que han realizado y una evaluación a los operativos. Dijo que lo más difícil es volver a la calma y sacar del estrés psicológico sobre todo de los 50 policías que fueron retenidos durante los días de paro, porque recibieron ataques psicológicos, amenazas de golpes y ajusticiamientos, que es lo que realmente les preocupa y es lo que tienen que trabajar a través de las autoridades superiores.

Fueron cuatro episodios diferentes los que se registraron la retención de los uniformados, los primeros fueron retenidos del interior de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) Eloy Alfaro, el segundo episodio es en Lasso, el tercero ocho uniformados fueron retenidos del destacamento de Pujilí y finalmente un grupo de 37 policías fueron retenidos mientras se dirigían a fortalecer la seguridad en la cárcel regional.

Para la liberación de los policías retenidos fue fundamental la intervención Jorge Miño, gobernador de la provincia, todas las acciones se coordinaron directamente con la primera autoridad de la provincia, Tenientes y Jefes Políticos, lo que ha permitido la pronta liberación.

Por las agresiones y retenciones de los uniformados tuvieron que cerrar las puertas de atención de los destacamentos de policía en Pujilí, Saquisilí, Salcedo y Unidades de Policía Comunitaria (UPC) quienes se replegaron hasta el comando de Policía para atender las emergencias a través del ECU-911.

En el caso del destacamento de Pujilí están verificando si existe destrucción, falta de algún equipo, armamento y munición que tienen en dotación en cada uno de los UPC.

Atención de emergencias

Durante los días de movilización los policías atendieron las emergencias de control del orden público, violencia intrafamiliar y personas desaparecidas, todos los casos presentados han sido resueltos en su totalidad.

En la noche y madruga realizaban patrullajes en el bus verificando, controlando y haciendo registros, pese a la dificultad y las amenazas que recibieron, con tal de no dejar desprotegida a la ciudadanía. (MT)

Los integrantes del comando de policía en Cotopaxi trabajan en la cuantificación de los bienes afectados durante las movilizaciones, en la provincia no se registró la destrucción total de patrulleros pero sí la rotura de parabrisas, retrovisores, por lo que están en las verificaciones.

El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi, manifestó que deben hacer una retroalimentación a los procesos que han realizado y una evaluación a los operativos. Dijo que lo más difícil es volver a la calma y sacar del estrés psicológico sobre todo de los 50 policías que fueron retenidos durante los días de paro, porque recibieron ataques psicológicos, amenazas de golpes y ajusticiamientos, que es lo que realmente les preocupa y es lo que tienen que trabajar a través de las autoridades superiores.

Fueron cuatro episodios diferentes los que se registraron la retención de los uniformados, los primeros fueron retenidos del interior de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) Eloy Alfaro, el segundo episodio es en Lasso, el tercero ocho uniformados fueron retenidos del destacamento de Pujilí y finalmente un grupo de 37 policías fueron retenidos mientras se dirigían a fortalecer la seguridad en la cárcel regional.

Para la liberación de los policías retenidos fue fundamental la intervención Jorge Miño, gobernador de la provincia, todas las acciones se coordinaron directamente con la primera autoridad de la provincia, Tenientes y Jefes Políticos, lo que ha permitido la pronta liberación.

Por las agresiones y retenciones de los uniformados tuvieron que cerrar las puertas de atención de los destacamentos de policía en Pujilí, Saquisilí, Salcedo y Unidades de Policía Comunitaria (UPC) quienes se replegaron hasta el comando de Policía para atender las emergencias a través del ECU-911.

En el caso del destacamento de Pujilí están verificando si existe destrucción, falta de algún equipo, armamento y munición que tienen en dotación en cada uno de los UPC.

Atención de emergencias

Durante los días de movilización los policías atendieron las emergencias de control del orden público, violencia intrafamiliar y personas desaparecidas, todos los casos presentados han sido resueltos en su totalidad.

En la noche y madruga realizaban patrullajes en el bus verificando, controlando y haciendo registros, pese a la dificultad y las amenazas que recibieron, con tal de no dejar desprotegida a la ciudadanía. (MT)

Los integrantes del comando de policía en Cotopaxi trabajan en la cuantificación de los bienes afectados durante las movilizaciones, en la provincia no se registró la destrucción total de patrulleros pero sí la rotura de parabrisas, retrovisores, por lo que están en las verificaciones.

El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi, manifestó que deben hacer una retroalimentación a los procesos que han realizado y una evaluación a los operativos. Dijo que lo más difícil es volver a la calma y sacar del estrés psicológico sobre todo de los 50 policías que fueron retenidos durante los días de paro, porque recibieron ataques psicológicos, amenazas de golpes y ajusticiamientos, que es lo que realmente les preocupa y es lo que tienen que trabajar a través de las autoridades superiores.

Fueron cuatro episodios diferentes los que se registraron la retención de los uniformados, los primeros fueron retenidos del interior de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) Eloy Alfaro, el segundo episodio es en Lasso, el tercero ocho uniformados fueron retenidos del destacamento de Pujilí y finalmente un grupo de 37 policías fueron retenidos mientras se dirigían a fortalecer la seguridad en la cárcel regional.

Para la liberación de los policías retenidos fue fundamental la intervención Jorge Miño, gobernador de la provincia, todas las acciones se coordinaron directamente con la primera autoridad de la provincia, Tenientes y Jefes Políticos, lo que ha permitido la pronta liberación.

Por las agresiones y retenciones de los uniformados tuvieron que cerrar las puertas de atención de los destacamentos de policía en Pujilí, Saquisilí, Salcedo y Unidades de Policía Comunitaria (UPC) quienes se replegaron hasta el comando de Policía para atender las emergencias a través del ECU-911.

En el caso del destacamento de Pujilí están verificando si existe destrucción, falta de algún equipo, armamento y munición que tienen en dotación en cada uno de los UPC.

Atención de emergencias

Durante los días de movilización los policías atendieron las emergencias de control del orden público, violencia intrafamiliar y personas desaparecidas, todos los casos presentados han sido resueltos en su totalidad.

En la noche y madruga realizaban patrullajes en el bus verificando, controlando y haciendo registros, pese a la dificultad y las amenazas que recibieron, con tal de no dejar desprotegida a la ciudadanía. (MT)

Los integrantes del comando de policía en Cotopaxi trabajan en la cuantificación de los bienes afectados durante las movilizaciones, en la provincia no se registró la destrucción total de patrulleros pero sí la rotura de parabrisas, retrovisores, por lo que están en las verificaciones.

El coronel Javier Morales, comandante de Policía en Cotopaxi, manifestó que deben hacer una retroalimentación a los procesos que han realizado y una evaluación a los operativos. Dijo que lo más difícil es volver a la calma y sacar del estrés psicológico sobre todo de los 50 policías que fueron retenidos durante los días de paro, porque recibieron ataques psicológicos, amenazas de golpes y ajusticiamientos, que es lo que realmente les preocupa y es lo que tienen que trabajar a través de las autoridades superiores.

Fueron cuatro episodios diferentes los que se registraron la retención de los uniformados, los primeros fueron retenidos del interior de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) Eloy Alfaro, el segundo episodio es en Lasso, el tercero ocho uniformados fueron retenidos del destacamento de Pujilí y finalmente un grupo de 37 policías fueron retenidos mientras se dirigían a fortalecer la seguridad en la cárcel regional.

Para la liberación de los policías retenidos fue fundamental la intervención Jorge Miño, gobernador de la provincia, todas las acciones se coordinaron directamente con la primera autoridad de la provincia, Tenientes y Jefes Políticos, lo que ha permitido la pronta liberación.

Por las agresiones y retenciones de los uniformados tuvieron que cerrar las puertas de atención de los destacamentos de policía en Pujilí, Saquisilí, Salcedo y Unidades de Policía Comunitaria (UPC) quienes se replegaron hasta el comando de Policía para atender las emergencias a través del ECU-911.

En el caso del destacamento de Pujilí están verificando si existe destrucción, falta de algún equipo, armamento y munición que tienen en dotación en cada uno de los UPC.

Atención de emergencias

Durante los días de movilización los policías atendieron las emergencias de control del orden público, violencia intrafamiliar y personas desaparecidas, todos los casos presentados han sido resueltos en su totalidad.

En la noche y madruga realizaban patrullajes en el bus verificando, controlando y haciendo registros, pese a la dificultad y las amenazas que recibieron, con tal de no dejar desprotegida a la ciudadanía. (MT)