Tala indiscriminada de madera acecha la zona norte

La tala de madera ha sido muy desordenada, con la destrucción de los bosques se perjudican los caminos vecinales

Desde hace aproximadamente tres décadas, la provincia de Esmeraldas ha sido el escenario de un intenso proceso de deforestación, degradación y transformación de sus áreas boscosas. El problema surge más en las comunidades del norte, como Borbón ubicada en el cantón Eloy Alfaro, en el cantón San Lorenzo, donde sus bosques se están talando masivamente con o sin permisos de la autoridad competente.

Ecuador

Desde 1990 hasta 2018, la tala ilegal de bosques se ha concentrado en ocho provincias de la Amazonía y de la Costa

según el Ministerio del Ambiente (MAE) muestra que entre 1990 y 2018 el país perdió alrededor de dos millones de hectáreas de bosques naturales. Las provincias más afectadas son lógicamente la Amazonía, Manabí y Esmeraldas registran la mayor cantidad de tala y deforestación, mientras que en la Sierra Norte, Azuay, Chimborazo, Cotopaxi, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas y Tungurahua se produce la comercialización de la madera ilegal.

Zona norte la más afectada

Esmeraldas

La provincia esmeraldeña, es zona costera de grandes bosques, Borbón es una parroquia del cantón Eloy Alfaro, uno de los más cercanos a la frontera norte con Colombia, lleno de manglares y playas que forman parte de la ecorregión del Chocó que se extienden desde Panamá hasta el noroccidente del Ecuador.

Hugo, morador de San Lorenzo, desde su perspectiva las personas que ejecutan está acción no les importa que haya fincas alrededor porque dejan totalmente destruida las vías afectando la movilización de los productos agrícola que salen al mercado.

Borbón un sector que contiene bosques tropicales de la costa del Pacífico latinoamericano, su riqueza y diversidad ecológica del mundo debería estar destinado a la conservación territorial. Sin embargo, a pesar de ser un territorio lleno de bosques desde hace unas décadas se encuentra amenazado por la deforestación, el monocultivo de palma, la minería ilegal y la tala indiscriminada de balsa.

Problema

El crecimiento de las ciudades, sus pobladores y la necesidad de edificaciones ha pasado factura a la naturaleza porque el hombre ha requerido de madera resistente a las adversidades del tiempo. A su vez la necesidad ha influido en la tala indiscriminada de los bosques que se inician en Quinindé y se extiende a los demás cantones de la provincia esmeraldeña.

Es condenado por la ley con años de cárcel

Comuna Pichiyaku

La comuna Pichiyaku ubicada en el cantón Eloy Alfaro según denuncias ciudadanas atraviesa una presunta tala indiscriminada de madera y daños en las calles por el paso de los vehículos que transcurren en la zona para sacar la madera. Sonia, moradora y dueña de una de los terrenos afectados evidencia como las maquinarias que recorren por la zona dejan afectando la calle. Los sectores se encuentran poblados de sembríos como cacao u otras plantas que son fuentes de ingreso económico en el lugar. A través de redes sociales también se conoció la denuncia y el estado deplorable que mantienen esas calles de acceso que ahora se han convertido en lodazales y empeoran por efectos de la lluvia. Los comuneros esmeraldeños exigen se respete el derecho a las especies naturales, precautelar la vida floral para evitar casos de tala indiscriminada en la comunidad.

Telembi

La Parroquia Telembi, es otro de los puntos calientes que ha evidenciado la problemática, perteneciente a Eloy Alfaro, hasta el año 2000, a pesar de la intensiva deforestación, seguía siendo uno de los principales reservorios de bosque de la Provincia y del Ecuador. Cerca de los 2 millones de m3 de madera que se consumían en el país, provenían de Esmeraldas, se estimó que en 1.958 existían 2´750.000 hectáreas; mientras que para el año de 1979 esta área disminuyo a 1´740.000 hectáreas, y hasta fines de los 90, existía menos de 500.000 hectáreas (18.18%) de bosque nativo.

El Ministerio del Ambiente (MAE), ha evidenciado la situación y a través de sus direcciones provinciales proceden a la detención de madera en lugares que sirven como centros de acopio ilegales, pese a los esfuerzos de control ejecutados gracias a las denuncias de la comunidad, aún existen personas que no ven la conservación de los bosques como un bienestar general. Sólo en el sector Punta de Piedra, en la parroquia Borbón del cantón Eloy Alfaro hace años las dependencias gubernamentales evitaron que una empacadora comercialice madera obtenida producto de la tala indiscriminada en Ecuador. La retención de la madera se sustentaba en el informe del Coopno, cuyos indicios señala que este producto proviene de la deforestación del bosque nativo y regeneración natural.

Deforestación

Existen diferentes formas de deforestar el bosque con actores sociales que no respetan la vida floral. Los explotadores de madera de contrachapado un claro ejemplo que buscan bosques que sean accesibles y cercanos a ríos o esteros, realizando su actividad en época de invierno porque son navegables y se les facilita el arrastre de la madera rolliza, las especies más utilizadas son el cuángare, chalviande, sande y coco.

En cuanto a la diferencia de rentabilidad, hay que destacar que la explotación de madera en trozas representa mayores ingresos a la familia, porque hay menos utilización de mano de obra y tiempo, no así la madera aserrada que representa un costo mayor del 30 al 40% más en mano de obra y días de trabajo con motosierra.

Ley para sensibilizar

Un aspecto importante que ha ayudado a reducir las cifras de tala ilegal en los últimos años es el Código Integral Penal que entró en vigencia en 2014 en Ecuador, la normativa contempla una sanción de uno a tres años a quienes comentan delitos en contra de especies forestales.

Si la tala indiscriminada sigue y no hay un compromiso de reforestar masivamente, en el año 2030, todas las especies de bosques se habrán extinguido en el norte de Esmeraldas, como sucedió en Manabí, Loja y otras provincias del país. (CS)