ATACAMES
Cuando faltaban dos días para que el camal de Tonchigüe, cantón Atacames, cumpliera dos años y cuatro meses sin funcionar, el pasado lunes las autoridades municipales cumplieron con inaugurar el remodelado matadero público, sin embargo, hasta ayer no se realizaba sacrificio de animal alguno.
Ese centro de sacrificio de animales fue cerrado el 19 de marzo de 2015 por disposición de la Agencia Ecuatoriana de Aseguramiento de Calidad del Agro (Agrocalidad), debido a que no prestaba las condiciones mínimas necesarias para las tareas que allí se cumplían.
En esa fecha, la entidad de control hizo algunas recomendaciones a la Municipalidad para la readecuación del camal y que vuelva a ser operativo, programándose 45 días para su reapertura, no obstante, ese lapso establecido se extendió por un tiempo que, a ratos, parecía interminable.
Gestiones
Los introductores de carnes realizaron diversos e intensas gestiones y hasta se efectuaron medidas de presión para exigir que las autoridades municipales culminen con los trabajos que se habían planificado, mientras el sacrificio de animales se lo hacía en camales improvisados y hace pocos días Agrocalidad decomisó un animal en un matadero clandestino de la parroquia Tonchigüe.
Esa situación colmó la paciencia de los ganaderos e introductores de carnes que, a manera de protesta, acudieron hasta los bajos del Municipio con ganado vacuno que no tenían donde sacrificar.
Mientras tanto, desde la Municipalidad, pese a que desde la Alcaldía se anunció por varias ocasiones la reapertura del camal, eso no se cumplía y los técnicos y autoridades justificaban el retraso aduciendo incumplimientos de las personas que habían sido contratadas para la instalación de las maquinarias al interior del matadero público.
Retraso
“Ha sido un dolor de cabeza; hemos tenido mala suerte con aquellas personas a las que se les dio esa responsabilidad, pero gracias a Dios al final del túnel vimos una luz”, dijo el alcalde de Atacames, Byron Aparicio Morcillo, en una intervención pública en el acto de inauguración del remodelado camal.
Recordó que cuando asumió la administración la recomendación era la construcción de un biodigestor y luego se fueron recomendando otras mejoras al camal y con mucha responsabilidad, según dijo, asumieron esos trabajos.
Agregó que el retraso se debió a que en muchas ocasiones los equipos y herramientas que llegaban para ser instalados en el camal no eran los que se contemplaban en las recomendaciones técnicas y por ello, como autoridad, no los aceptaba y debían ser cambiados por los que estaban especificados en los contratos de adquisición.
Inauguración simbólica
Al final destacó que el esfuerzo había dado sus frutos y hoy el cantón Atacames cuenta con uno de los mataderos públicos mejor estructurados de la provincia y esperaba obtener la calificación máxima de Agrocalidad.
El director distrital de esa entidad de control, Roberto Villamarín, dijo que la inauguración era simbólica porque con las maquinarias el camal ha alcanzado un 80% de lo que necesita para obtener la certificación de matadero bajo inspección oficial.
“En el transcurso de estas semanas nosotros vamos a hacer el seguimiento al proceso de faenamiento y administrativo que se debe llevar en el camal para que nosotros podamos entregar esa certificación”, dijo la autoridad de control. (PAM)
Ultiman detalles
Ayer, pese a que el camal cuenta con maquinarias sofisticadas y el personal capacitado para el sacrificio de animales, aún no se realizaban tareas en sus instalaciones, porque los introductores de carnes y las autoridades municipales y de Agrocalidad ultiman detalles en lo que tiene que ver con las guías de movilización de ganado y a los valores para el uso del remodelado matadero público.