Futbolista muere jugando

SEPELIO.  En medio de un masivo a dios  fueron sepultados los restos mortales del futbolista  Santiago Héctor Ortiz Chalá, la tarde del pasado sábado.
SEPELIO. En medio de un masivo a dios fueron sepultados los restos mortales del futbolista Santiago Héctor Ortiz Chalá, la tarde del pasado sábado.

Luego de haber permanecido en estado de coma en la sala de cuidados intensivos del Hospital del Sur de Esmeraldas Delfina Torres de Concha por más de 28 días, el viernes 15 de septiembre, a causa de un paro respiratorio fulminante, falleció el futbolista Santiago Héctor Ortiz Chalá, de 44 años de edad.

El occiso, el 20 de agosto de 2017 mientras regresaba de un partido de fútbol que había jugado en la Unión de Atacames, zona sur de la provincia de Esmeraldas, se accidenta, en circunstancias que se movilizaba en la moto de un amigo que le llevaría hasta su hogar, ubicado en el barrio Erlinda Klínger de la Isla Piedad, donde no alcanzó a llegar.

Según lo informado por sus familiares, al parecer el conductor de la motocicleta frenó y la víctima cayó algunos metros sobre la calzada afectándole la masa encefálica que lo mantuvo prostrado en esa casa de salud, donde le dieron algunos paros cardiorrespiratorios que los superó, hasta que le dio el más fuerte que no lo soportó.

Trayectoria futbolística
Su esposa, Verónica García, quien se mostraba entristecida por la partida de su conviviente, dijo que murió haciendo lo que le gustaba, ‘jugar futbol’. Comentó que el fallecido le había dicho que empezó a jugar desde muy joven, por ese motivo guardaba sus medallas y copas como los recuerdos más preciados.

Sobre su trayectoria, dijo que jugó en las ligas barriales, cantonales, fútbol playero, también integró el equipo Santa Rita y el Delfín.

Además, laboró en algunas empresas como la Nestlé, Casa Plass, Ismar, entre otras. Procreó con su esposa cinco hijos: tres mujeres y dos hombres.

Su hija Cindy Ortiz manifestó que el día anterior al accidente, observó a su padre triste, incluso, que cuando escuchaba música lo hacía con volumen alto, pero ese rato lo hizo con bajo. “Eso me extrañó”, comentó, agregando que eran señales que algo le sucedería pero no lo interpretó. (MES)

Velatorio y sepelio
° En medio del dolor de sus hijos, esposa y demás familiares, amigos y compañeros del fútbol, se velaron sus restos mortales en su domicilio ubicado en el barrio Erlinda Klínger, sector Isla Piedad. A las 14:00 del pasado sábado se llevaron a cabo las exequias fúnebres en el cementerio Solange de la ciudad de Esmeraldas.