Hacia la guerra

Las elecciones regionales de Venezuela propinaron una estrepitosa y sorpresiva derrota a la oposición: ¿cómo arrasó el oficialismo si 80% de los venezolanos rechaza la gestión del presidente Nicolás Maduro?

Sin duda, hubo una mezcla de factores: abultada abstención en las filas opositoras, disciplina y movilización impecable de la poderosa maquinaria del partido socialista y maniobras “fraudulentas” -denunciadas por la oposición- por parte de un árbitro electoral acusado de servir al Régimen.

El oficialismo ganó el domingo con 54% de los sufragios a escala nacional 18 gobernaciones y la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) las otras cinco.

Todos los sondeos daban como claro favorito a la oposición ante la grave crisis que abruma a los venezolanos, con una severa escasez de alimentos y medicinas, y una inflación que los analistas económicos estiman será de alrededor de 1.200% este año.

Los chavistas se unificaron para protegerse y se enfrentaron a una oposición fracturada y desanimada. Muchos no votaron decepcionados por el fracaso de las últimas protestas para exigir la salida del Presidente, con saldo de 125 muertos, y molestos porque la MUD aceptó unos comicios con un poder electoral en el que no creen.

Ahora, la situación es más grave que antes. Los enfrentamientos continuarán y habrá más muertos. Con estas elecciones, la mayoría de los venezolanos desenmascaró las elecciones como lo que son: una maniobra táctica de Maduro para aferrarse al poder. Venezuela se dirige hacia una guerra civil.

«El buen ciudadano es aquel que no puede tolerar un poder que pretende hacerse superior a las leyes”.

Cicerón
Escritor y político romano (106 AC-43 AC)

«Cuando uno no vive como piensa, acaba pensando como vive”.

Gabriel Marcel (1889-1973)
Filósofo francés.