ATILIO RUGEL ALBÁN
“La Patria está herida de muerte y es que se cumple lo que sostiene”, W. Shakespeare. Que el hombre tiene algo de racionalidad y de animalidad y en la búsqueda de un equilibrio cuando se impone la animalidad entonces surge la fiera proclive a la maldad con fines preconcebidos. Así, de esta manera, los de la ‘década corrupta’ han cometido los más grandes desatinos de la historia republicana del Ecuador, que les hace ganadores de uno de los nueve círculos de Dante Aligere en su Divina Comedia, donde les espera una paila llena de aceite hirviendo como castigo a los oprobios que han dado al pueblo y es que los ‘caraduras’ que con pensamientos diabólicos pretenden con una retórica desgastada y mediocre seguir engañando al pueblo, no lo van a conseguir.
Dice el dicho que “quien siembra vientos cosecha tempestades” y eso es lo que está viviendo el correísmo y sus colaboradores, que llenaron de odio a la sociedad ecuatoriana y que nadie se les escapó de su ira que tiranizó, encarceló y adjetivó con expresiones disonantes a quienes no se sumaban a su forma absurda de gobernar. Se destapó la olla de grillos y hoy comienzan a salir los pecados escondidos que intentaron soslayar por los acolitadores de las anomalías que son tan culpables como su ejecutor.
Que la Comisión que se ha formado de la Veeduría Ciudadana formada por eminentes personalidades y que forman parte del Foro Económico y de Finanzas, haga un examen exhaustivo de todas las anormalidades y que ese Consejo de Participación Ciudadana que ha sido el protector que brindó apoyo a los que cometieron tantos errores, debe extinguirse. Repito que lo de Odebrecht es apenas una parte del gran torrente de agua que corre bajo los puentes.
Bien por los partidos políticos que han pedido a la Fiscalía que se lo llame a confesión al expresidente Correa impidiéndole salir del país, porque él tiene la obligación moral y ética de exponer al pueblo los desatinos cometidos. Que se cambien en la Asamblea a quienes presiden las comisiones que se formaron por parte del correísmo y que solo sirven para oponerse a los planteamientos que se hacen por la salud del pueblo, obstaculizando trámites que quieren sacar a la luz toda la verdad.
Es hora que se baje el telón y surjan todos los comprometidos que faltan en la lista y que tratan que el pueblo ignore sus nombres. Que Glas, más allá que ya no es V.P. debe ser enjuiciado políticamente. El ciudadano rechaza a quienes violentando procedimientos han llevado al Ecuador a un caos económico.