Este mediodía se presentan Juan José Padilla, Juan Bautista y Álvaro Samper.
Por: Santiago Aguilar
Las corridas de toros son una de las actividades más destacadas de la larga y variada agenda de actos que componen en sexagésima séptima Fiesta de la Fruta y de las Flores que se cumple en Ambato. Los festejos taurinos convocan a los aficionados locales y originarios de otras ciudades que llegan al monumental escenario con la idea de mirar el quehacer de importantes figuras del toreo mundial.
Hoy desde las 12:00 se llevará a cabo el segundo festejo de feria en el que actuará el matador de toros español Juan José Padilla junto al francés Juan Bautista Jalabert y el compatriota Álvaro Samper alternando en la lidia de un lote de toros de las ganaderías de Mirafuente y Vistahermosa.
La despedida
El cartel despierta expectativas por lo variado de la combinación y la experiencia de la terna de espadas que encabeza Padilla conocido en sus inicios como el “Ciclón de Jérez” por su enorme valor y solvencia a la hora de enfrentar a los astados. Su esforzado trajinar en los ruedos a lo largo de 23 años fueron marcados por la terrible cornada que sufrió en octubre de 2011 tras cuyas graves heridas volvió a los ruedos convertido en el “Pirata”, por el parche que cubre la zona de la lesión. No obstante la merma física, la capacidad técnica agregada a una mística y afición inagotables, le permitieron reinsertarse en los circuitos taurinos, abriéndose espacio en privilegiados carteles hasta convertirse en máxima figura del toreo. Hoy al cabo de casi un cuarto de siglo de dura brega, Juan José Padilla inicia en Ambato su última temporada como matador de toros al anunciar su despedida de una profesión a la que honró tarde a tarde.
El maestro
En cuanto a Juan Bautista Jalabert cabe señalar que es una de las más importantes figuras de su país, nacido en Arles hace 36 años dotando de una notable técnica que sostiene al toreo de calidad que le es característico; sin embargo es su capacidad lidiadora que alcanza niveles de maestría lo que le ha granjeado el reconocimiento de las aficiones del orbe. Tomó la alternativa en su ciudad natal en 1999, el mismo año confirmó su alternativa en Madrid y emprendió su primera campaña americana con triunfales escalas en las principales ferias de esta parte del mundo. Juan Bautista Jalabert se ha presentado en los ruedos ecuatorianos de Quito, Ambato y Riobamba arenas en las que confirmó su notable capacidad y su filosofía taurina sintetizada en una frase que el torero cita con emoción: “para todos los que llevan el traje de luces, cada día es una aventura para materializar los sueños”.
La madurez
El caso del compatriota Álvaro Samper también debe inscribirse en el buen gusto y la solvencia al manejar los engaños; nacido en el seno de una familia con identidad taurina -nieto del ganadero Ramiro Campuzano y primo hermano del matador de toros Martín Campuzano- su infancia estuvo marcada por los toros bravos en los campos de Atocha. Una estupenda campaña de novillero en ruedos del Ecuador y España le llevaron a la alternativa en Quito la tarde del 30 de noviembre de 2009, de allí en adelante una paciente lucha en los ruedos con destacadas faenas, en especial durante las dos últimas temporadas en las que desde la madurez y el poso ha surgido su mejor toreo.
Una vez más como desde hace más medio siglo, la Feria de Nuestra Señora de la Merced ofrece contenido a la anual celebración; el caso es que la actividad taurina en esta ciudad adquirió su auge definitivo con el establecimiento de la Fiesta de la Fruta y de las Flores y –cómo no- con la construcción de la Plaza de Toros la Monumental Ambato inaugurada hace casi 55 años, el 17 de marzo de 1963 con Raúl Acha “Rovira”, Miguel Ortas y Alfonso Vásquez II en el cartel, lidiando toros de José María Plaza y Arturo Gangotena.