Presuntamente un pirómano sería quien provocó el incendio que en cuestión de cinco minutos redujo a escombros la casa de madera donde vivía Tania Viviana González García, con sus siete hijos y un nieto, ubicada en el barrio ‘Victoria de Dios’, sector ‘La 13’, cantón Atacames, zona sur de la provincia de Esmeraldas.
Se desconocen las causas que tuvo el maléfico hombre, para supuestamente ingresar a la vivienda, aprovechando que la puerta principal no estaba con seguro, rociarle gasolina y prenderle fuego, a eso de las 15:00, del jueves último.
Carmen González, hermana de la dueña de casa, comentó que, según el testimonio de una niña de 8 años, hija de la ahora damnificada, la pequeña subió a la vivienda a tomar agua, donde encontró a un hombre encapuchado, abriendo las hormillas de la cocina a gas de uso doméstico, rociando gasolina y la incendió con un fósforo.
En cenizas
“Mi sobrina afirma haber visto al hombre dentro de la casa, explicando que presenció cuando le prendió fuego, por eso, ella bajó a la carrera y fue a avisar a mi hermano que vive alado”, comentó la dama la tarde de ayer, vía telefónica.
Sostiene que la hipótesis, del pirómano tiene sentido, porque la casa se quemó en unos cinco minutos, lo que no tiempo a sacar nada del interior, pues, todos los enseres y ropa de la familia se quemaron.
En el sitio de la desgracia hay una casa aledaña, de un hermano de la ahora damnificada, pero nadie vio al supuesto pirómano. Ese inmueble también de madera, estuvo a punto de quemarse, de no haber sido oportuna la presencia de los miembros del Cuerpo de Bomberos de Atacames, otra familia estaría en similar situación.
Necesitan ayuda
“La tarde del jueves mi hermana estaba trabajando en Tonsupa, arreglando departamentos, labor con la cual se gana el sustento para sus hijos, porque es madre soltera, desde hace unos siete años vivía en la casa que un supuesto pirómano la quemó”, dijo Carmen González, quien le dio la ingrata noticia a su consanguínea a través de una llamada telefónica.
Reveló que sus sobrinos únicamente se quedaron con la ropa que tenían puesta la tarde del jueves, porque las llamas impidieron sacar pertenencias de la casa, por ello, esperan la ayuda de las instituciones y personas solidarias; 09 69 64 06 50, es el número celular para las contribuciones.
El siniestro no dejó personas heridas, solo daños materiales, pues, la dueña de casa estaba trabajando, los niños jugando en la casa del tío; la hija mayor de la ahora damnificada estaba en Quito. (DMG)