Unas 30 familias con personas oriundas del cantón San Lorenzo, están asentadas en el conocido sector llamado ‘Sanlorencito’, en la cooperativa Río Teaone, detrás de la Termoesmeraldas.
Para llegar a ‘Sanlorencito’ se ingresa por la parada conocida como los mormones, frente a la sucursal del Banco Pichincha en la ciudadela Tolita 1, margen izquierda del río Teaone antes de llegar al barrio 50 Casas, existen unas ocho cuadras con cerca de 30 familias oriundas del norteño cantón San Lorenzo.
A decir de sus habitantes, tomaron este nombre precisamente porque muchos se conocían, nacieron y se criaron en el cantón San Lorenzo de la provincia de Esmeraldas.
Muchos llegaron por desarrollo personal y profesional que obligadamente tuvieron que dejar a sus padres y familiares para conseguir mejores días; en otros casos fueron obligados a dejar sus hogares y familiares por la inseguridad que estaba ganando terreno desde hace unos diez años.
Alegre y trabajador
Recuerdan a San Lorenzo como un pueblo alegre, festivo, trabajador, donde nadie se metía con el otro, existía respeto, cordialidad y mucha camaradería. Las mujeres, unas en sus tareas del hogar, otras en los ríos lavando prendas de vestir; los hombres en labores de pesca, extracción de madera y venta de mariscos.
Por el año 2003 la situación de inseguridad y violencia se desató y obligó a muchos a salir de su pueblo natal: amenazas, desalojos, grupos irregulares sembraron el temor entre muchos pobladores, quienes vieron como solución trasladarse a la ciudad de Esmeraldas en busca de tranquilidad y mejores oportunidades de vida.
En la mayor parte de las familias que conforman el asentamiento hay una persona oriunda de San Lorenzo, como el caso de Rómulo Torres, que hace 22 años salió desde su tierra para desarrollarse profesionalmente y trae a la memoria que su cantón era un territorio de paz, “en esos años usted se amanecía en la calle o se quedaba dormido en cualquier sitio y no pasaba nada”.
Alarma por ataques
“En nuestro barrio junto a mi esposa y mis tres hijos tenemos 13 años viviendo, es muy alarmante tantos ataques a personas inocentes, me preocupan mis padres y familiares que aún están allá”, expresó Torres.
Cirilo Casierra, que desde hace 14 años vive en la ciudad de Esmeraldas, es miembro de la Policía Nacional, reside en el sector denominado ‘Sanlorencito’, donde con las familias que allí moran mantienen la tranquilidad del lugar.
“La situación actualmente es crítica, mis padres y hermanos viven allá, a diario converso con ellos y están tensos y nerviosos con la situación que están viviendo en zozobra”, manifestó el gendarme.
“Los actuales ataques no son novedad, el control de nuestra tierra desde muchos años se le salió de las manos al gobierno, no es seguro vivir en el cantón”, recordó Claudia, nombre protegido, quien por seguridad prefiere no dar su nombre. (KOP)
Nombre creado por amor
‘Sanlorencito’ no está conformado como barrio, es un sector de unas ocho cuadras en donde han construido sus casas varias personas nacidas y criadas en el cantón de San Lorenzo desde hace unos 13 años, siendo por ese motivo que se le conoce con ese nombre.
“A mis familiares que residen allá les recomiendo que no salgan de sus casas, que solo lo hagan en caso de emergencia”.
Cirilo Casierra,
Morador de ‘Sanlorencito’.
“Muchos han salido de su tierra obligados por la inseguridad y violencia que actualmente se ha apoderado de nuestro cantón”.
Rómulo Torre,
Morador de ‘Sanlorencito’.