Vecinos del barrio San Vicente, de Quinindé, están preocupados porque unas casas abandonadas ubicadas en la calle principal del sector, están siendo utilizadas como guaridas de adictos a las drogas y de bandas de delincuentes.
Son varios los asaltos a mano armada que han ocurrido en las últimas semanas en contra de vecinos del barrio, quienes solicitan a los propietarios de las viviendas abandonadas darle mantenimiento y a la Policía que se realicen operativos nocturnos en el lugar.
El presidente del barrio, David Monar, expresó su preocupación por la presencia permanente de sujetos de dudosa procedencia en los predios abandonados, por lo que hizo un llamado a las autoridades policiales para brindar mayor seguridad a los habitantes de este populoso sector.
Mujer asaltada
Mientras que Marixa C., una de las moradoras que fue víctima de un asalto en días pasados, dijo que mientras caminaba por el lugar de una de las construcciones abandonadas, salieron dos sujetos quienes luego de insultarla y amedrentarla con cuchillos la obligaron a entregarles sus pertenencias.
“El delito ocurrió en horas de la noche como a eso de las 21:00, por lo que sería muy importante que la Policía, realice rondas nocturnas por el sector y ponga especial atención con los sujetos que se reúnen en esas viviendas desoladas a fumar drogas y cometer asaltos a los transeúntes”, indicó, la mujer.
Los dirigentes del barrio están socializando un proyecto de reinsertar a la sociedad a los adictos del barrio, en un programa de recuperación.