Por trece años consecutivos, ayer, se desarrolló la regata por la conservación del estuario del río Esmeraldas. Desde muy temprano, llegaron los participantes a orillas del afluente, cerca a una cantera, ubicada unos 300 metros arriba de la cabecera parroquial de San Mateo, para alistar las balsas con las cuales navegaron hasta el malecón de la parroquia Tachina, en la desembocadura del río.
En la ceremonia de partida intervinieron Mercedes Ávila Gonzales, integrante del Comité Organizador y Magno Bermeo, oficial de la Armada Nacional. Ambos coincidieron en destacar la importancia de la regata, por el mensaje que lleva implícito para motivar a todos los habitantes de la ciudad a conservar el estuario del río.
Con unción cívica los presentes de los equipos participantes entonaron el Himno Nacional. Luego en cada balsa, tres personas emprendieron el viaje hasta San Mateo, donde se realizó la elección de la Reina de la Regata, dignidad que recayó en María del Carmen Barrera Preciado, representante del equipo ‘Los Pepudos’.
Presencia de la Salud
El equipo combinado del Ministerio de Salud Pública y la Policía Nacional, como preludio que serían los ganadores de la jornada, hicieron una demostración de maestría en el baile de marimba, su danza fue saludada con un prolongado aplauso por parte de los asistentes, por la vistosidad y sobre todo, por la sincronización de los movimientos de los bailarines.
Antes de danzar, cada uno de los grupos dio lectura al mensaje ecológico. Todos hicieron fervientes llamados a no destruir la naturaleza, por el contrario, pidieron protegerla, para bienestar de las actuales y futuras generaciones.
La presencia de decenas de vehículos, de los medios de comunicación, de los moradores de la parroquia San Mateo y los turistas de la ciudad de Esmeraldas, fueron evidencias de la importancia de la regata, que tuvo su continuidad en el barrio La Propicia, donde se calificó la preparación delo los platos típicos preparados durante la travesía. De allí nuevamente los competidores remaron hasta llegar a la parroquia en Tachina, donde se culminó con la premiación.
EL DATO
Los vendedores informales de la parroquia San Mateo, ayer, tuvieron la oportunidad de vender sus productos, aprovechando la cantidad de personas que los visitaron.