‘Nos sentimos burlados, necesitamos hospital de especialidades’

EXCESO. En las afueras de Autoridad Portuaria donde estaban atendiendo los médicos extranjeros, se aglomeraron centenas de personas, la mayoría no logró ser atendido.
EXCESO. En las afueras de Autoridad Portuaria donde estaban atendiendo los médicos extranjeros, se aglomeraron centenas de personas, la mayoría no logró ser atendido.
EXCESO. En las afueras de Autoridad Portuaria donde estaban atendiendo los médicos extranjeros, se aglomeraron centenas de personas, la mayoría no logró ser atendido.
EXCESO. En las afueras de Autoridad Portuaria donde estaban atendiendo los médicos extranjeros, se aglomeraron centenas de personas, la mayoría no logró ser atendido.

Médicos estadounidenses atendieron gratuitamente según su planificación, pero la demanda social fue mayor.

Sin que nadie lo tocara, abruptamente él cayó sobre el asfalto. Enseguida, uno de los policías vestido de negro, sin dudar lo levantó con fuerza y cariño al adulto mayor que no soportó la inclemencia del sol y el tiempo esperando atención médica.

La caída generó voces de reacción de otros enfermos mayores de 60 años, quienes también, valientemente, seguían en pie esperando que ayer se abriera el portón gris de la explanada de Autoridad Portuaria de Esmeraldas (APE) que les separaba de los estadounidenses especialistas en medicina.

“Es una burla para los esmeraldeños”, “una vez más se demuestra la desorganización en temas masivos”, “Esmeraldas necesita urgente un hospital de especialidades”, eran las voces de quienes, pese a que se les dijo, ayer, que ya no habría atención (10:45), se aferraban a la esperanza de que eso cambiara durante el día. Pero no cambió.

Se fueron desilusionados

Entre los que no se atendieron están Gil Charcopa Caicedo, de 75 años; la mamá de Marielena Barrio, de 80; el papá de Viviana Franco con discapacidad física; María Quintero, de 75 años, y centenares de hombres y mujeres con niños en brazos que formaron una larga fila a la espera de atención.

“Llegué a las 06:00 y son las 10:30 (de ayer) y nos dicen que ya no hay atención. Mi papá tiene un tronco en la espalda que le duele y discapacitado, no es justo que no nos atiendan”, dijo con molestia Viviana.

Una hora antes, o sea a las 05:00, ya estuvo Mariela con su madre, con la esperanza de recibir atención preventiva para saber qué hacer con sus dolores de las tiroides, pero frente a la fatiga de la paciente generada por la espera, optaron por retirarse.

Cerca de ella deambulaba María Quintero, que resignada dijo que se regresaría hasta su casa ubicada en la comunidad de Colope, porque uno de miembros de la Marina informó en altavoz que se retiraran que ya no habría más atención ese día (ayer), pero que podían regresar hoy o hasta el viernes que estarán los médicos extranjeros que, incluso, harán cirugías en un barco.

Mala organización externa

Alejado del tumulto y protegiéndose del sol bajo un árbol, estaba Gil Charcopa Caicedo, él y tres familiares estaban resignados a no ser atendidos, pero esperaban pacientemente que saliera uno de los parientes que sí logró ingresar.

“La culpa de que no nos hayan atendido no es de los señores de Estados Unidos, es de los de acá de Esmeraldas que no organizaron bien. Nos hemos sentido burlados, en Esmeraldas lo que se necesita es un hospital con especialidades, por eso tanta gente buscando ayuda”, manifestó el hombre de 75 años.