Redacción MÉXICO
AFP
Arqueólogos mexicanos descubrieron una cueva con cientos de reliquias arqueológicas que podrían develar los misterios de la fascinante ciudad y centro ceremonial maya de Chichén Itzá, situada en la Península de Yucatán, informó este lunes el científico encargado del proyecto.
En ese “espacio místico” denominado Balamkú y considerado como un “tesoro científico” se han encontrado siete ofrendas constituidas por incensarios de cerámica “tipo Tláloc” -es decir, con rasgos similares a la imagen del dios de la lluvia en la cosmovisión maya-, y otros objetos, dijo en conferencia el investigador Guillermo de Anda.
Descubriendo las fechas de elaboración de esos artefactos, los arqueólogos confían en que podrán definir quiénes eran y de dónde llegaron sus antiguos habitantes, los itzaes.
La caverna, situada a dos kilómetros de El Castillo o Templo de Kukulcán de Chichén Itzá, había sido descubierta hace más de 50 años por unos lugareños que dieron aviso al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).