Las declaraciones del ministro de la Vivienda, Xavier Torres, en Portoviejo, relacionadas con la construcción de nuevos planes habitacionales en la provincia de Esmeraldas, para subsanar el déficit de vivienda post terremoto de abril de 2016, tiene preocupados a los gremios de profesionales esmeraldeños, luego de escuchar que esas obras serían otorgadas a empresas o contratistas de Quito y Guayaquil.
El presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Esmeraldas, Pericles Cañizares, hizo hincapié en el tema, porque durante el gobierno anterior, de los 200 millones de dólares que se utilizaron para la reconstrucción de la provincia, el 90% de la inversión fue ejecutada por profesionales de otras provincias, relegando a sus compañeros.
De acuerdo con Cañizares, el director provincial del Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), Luis Mena, hace 15 días en una reunión se comprometió con ellos a que las obras posiblemente recaerían en los profesionales de esta localidad.
Malestar y decisiones
Es por ello que, a través de la página web de la institución, fueron calificados para formar parte de los concursos en las contrataciones que iniciarán en mayo.
“Teníamos las esperanzas de que nos tomen en cuenta, pero ante una información que tenemos, en la que ya hay algunos supuestos contratistas haciendo inspecciones y revisando costos aquí en la provincia, causa malestar”, expuso el Presidente del cuerpo colegiado.
Cerca de 200 ingenieros civiles aglutina la organización, que detalla algunos sí se encuentran en deudas con el gobierno, pero que aquello se basa en la no generación de proyectos dentro de la provincia, llegando a declarar que no existen esmeraldeños trabajando en ninguna obra por parte del Miduvi.
Por su parte David Santillán, presidente de la Cámara de la Construcción de Esmeraldas, en la que se aglutinan más de 540 integrantes, está seguro de que las decisiones son tomadas desde Quito, pero que no debería ser así, teniendo una dirección provincial en el área.
Déficit de viviendas
3.000 viviendas, entre construcciones, reparaciones e incluidas aquellas obras incumplidas desde el año 2016, es el déficit de viviendas que mantiene la provincia de Esmeraldas, explicó el director provincial del Miduvi, Luis Mena, quien se refirió a que el Estado generará un porcentaje de los 82 millones de dólares que se destinó a nivel nacional.
Mena, no está de acuerdo en su totalidad con las declaraciones de Cañizares, quien precisa de inciertas a sus palabras, argumentando que hace tres semanas en Quito, delante del directorio veló para que se les otorgara una oportunidad a los profesionales esmeraldeños.
“Estoy por hacer una llamada (ayer) al Ministro para que se me de una explicación sobre el tema y daremos una declaración respectiva, porque considero que se debe reactivar la economía en la provincia de Esmeraldas, a través de los profesionales internos”, terminó diciendo.
Tres fases para viviendas
De las 3.000 viviendas que necesita Esmeraldas, existen diferencias aclara el director provincial del Miduvi, Luis Mena, entre ellas, reasentamientos, reparaciones y otros son construcciones en terrenos propios.
Si bien aún no se establece el lugar para empezar las construcciones dentro de los siete cantones de la provincia Verde, han delimitado tres fases: la primera de ellas, en terreno propio, cuyo ciudadano debe contar con un registro social de menos 34 puntos, poseer las escrituras del terreno, y le será adjudicado el 100 por ciento de su vivienda.
En una segunda fase, el Estado subsidiará hasta 6.000 dólares para una vivienda de 57 metros cuadrados, con todos los beneficios de ley, y abarcará a personas vulnerables, con discapacidad, adultos mayores, en protección de la mujer y madres embarazada o solteras.
Mientras que en la tercera fase, será a través de un crédito hipotecario con un interés del 4,99% y deberá ser subsidiado de la banca o de una constructora que quiera hacerse cargo de los planes de vivienda urbanizados.
Mano Calificada
El presidente de la Cámara de la Construcción de Esmeraldas, David Santillán, refirió que hace un par de años, se contrataron a profesionales de Esmeraldas y Manabí, cuyas obras (manos esmeraldeñas) perduran y se mantienen sin ningún problema, lo cual fue transmitido hacia el ministro y temen que se sigan relegando a sus compatriotas.
“Un claro ejemplo es el edificio del ECU 911 que se realizó con mano local, en contraste con el edificio del Registro Civil (contratistas de Quito) que hoy permanece cerrado por las deficiencias en su estructura”, declaró Santillán, como una muestra del trabajo que son capaces de llevar a cabo.