Derrame de combustible afecta actividad pesquera

CONTAMINACIÓN. En la mañana de ayer el pescador Ricardo Alcívar, mostraba a su embarcación y trasmallos que se encontraban cubiertas del combustible.
CONTAMINACIÓN. En la mañana de ayer el pescador Ricardo Alcívar, mostraba a su embarcación y trasmallos que se encontraban cubiertas del combustible.

Dos embarcaciones de igual número de familias de pescadores de la parroquia Súa, cantón Atacames, fueron afectadas en la noche del último lunes, alrededor de las 19:00, con un derrame de combustible en alta mar, presuntamente petróleo, situación que dejó inutilizables las herramientas de pesca causando un grave perjuicio a sus propietarios.

Ricardo Alcívar, propietario de la embarcación ‘Néstor’, refirió que la afectación ocurrió como a nueve millas náuticas frente a las costas entre Atacames y Súa, cuando una vez que habían arrojado el trasmallo al mar detectando un espejo de aproximadamente 300 metros a la redonda del indicado combustible.

Agregó que de inmediato levantaron el material de pesca para evitar que se siga contaminando, pero el resultado fue infructuoso, pues, hasta la embarcación fue cubierta por el negro y viscoso combustible.

Frecuente

Otro pescador afectado fue Hugo Chila, propietario de la embarcación ‘Gloria de Lowis’, quien contó una historia parecida y que le ocurrió en la misma área, añadiendo que él está seguro que eso es petróleo porque afectaciones como esas han sido reiteradas en la zona.

“Petrocomercial siempre ha conocido de los goteos permanentes por alguna situación, pero siempre ha evadido las responsabilidades más grandes cuando se presentan este tipo de derrames”, dijo el preocupado pescador, mientras observaba su embarcación aún embadurnada de lo que él cree se trate de petróleo.

Aseguró que esa entidad siempre ha tratado de controlar ese tipo de derrames, rociando otro producto químico que hace que el petróleo caiga a las profundidades del mar, pero allí sigue afectando a las especies marinas y él considera que esa es una de las principales razones por las que ya no encuentran peces para capturar en la zona.

Pérdidas

Los dos pescadores afectados calculan que las afectaciones por el daño de sus materiales de pesca bordean los 10 mil dólares, más los días que deben estar paralizados hasta adquirir los nuevos, lo que les causa un grave perjuicio porque no tendrán cómo llevar el pan diario a sus hogares.

Dijeron que, aparte de hacer conocer lo que les ha ocurrido a las entidades correspondientes, como al Ministerio del Ambiente y Petroecuador, también lo harán ante un juez competente para que determine las acciones de reparación que deban realizarse como consecuencia de lo ocurrido.

“Es que son dos cosas que deben repararse: primero, la afectación económica que hemos tenido nosotros como pescadores, y, segundo, la contaminación ambiental de la que está siendo objeto el área marina de esta zona”, manifestó Hugo Chila.