Revive al esperanza de cambio en la justicia

ATILIO RUGEL ALBÁN

La doctora Diana Salazar Méndez tiene la oportunidad de dejar una huella indeleble en la historia de la justicia ecuatoriana y no para sublimizar su ego, si no que eso es parte de su naturaleza humana que como mujer y madre ha dicho, que ella conoce los entretelones cómo se administra la justicia en el Ecuador.

Qué bueno que así sea y por eso le pidió a quienes conforman las Fiscalías del país; que espera de ellos: ‘Transparencia y valentía’, porque ya termina la etapa de los poderosos y ladrones de corbatas que roban, con ese dinero pagan los mejores abogados, que entran en fiesta, «les reducen las condenas y de allí salen ricos y el pueblo que olvida pronto, sus secuaces los convierten en miembros de clubes sociales; cuando estos sinvergüenzas deberían estar hirviendo en la paila más grande del infierno, porque el dinero los envilece y en los cargos públicos lo aprendieron a cuidar y proteger para sus banalidades, maltratando al desposeído ya que la voracidad que se agita en sus mentes no tiene límites.

Este mes de Marzo/2019 es histórico. Nueva autoridad en la Justicia y en sus inicios cae uno de los peces gordos del correísmo que ocupó la dirección del IESS, ex Prefecto de Pichincha y ex Ministro de Industrias don Ramiro González Jaramillo; quien había huido al Perú a disfrutar de los dineros que había tomado. Creemos que esta detención permitirá descubrir a otros comprometidos en esa maraña de arbitrariedades. Esto nos confirma que Correa y sus allegados supieron hacer bien las cosas, conscientes como estaban a donde querían llegar y perpetuarse en el poder por más de 20 años.

Así con una Ley que protegía a tantos irresponsables pensaron que jamás les iba a llegar su fin porque no habría barreras que los detuviera; pero hoy sabemos, que se equivocaron porque no hay mal que dure cien años. Los ecuatorianos debemos estar presentes en cada grito y en cada voz del pueblo oprimido. Que comience la paz en nuestro entorno y que se erradique el hambre, la falta de trabajo y que los que se atrincheraron en ese círculo vicioso desaparezcan para siempre de la vida política.

Doctora Diana Salazar, estaremos vigilantes de sus ejecutorias ratificando que no teme a los poderosos y que ha llegado a ese cargo para que se reinaugure la justicia en el Ecuador.