La muestra anual de arte Lgbtiq+ prepara su nueva edición con el enfoque ‘Archivos’

ORGANIZACIÓN. Gledys Macías, mediador comunitario, y Roberto Vega, investigador del CAC.
ORGANIZACIÓN. Gledys Macías, mediador comunitario, y Roberto Vega, investigador del CAC.

El Centro de Arte Contemporáneo (CAC) se prepara para recibir la nueva edición de la muestra internacional de arte Lgbtiq+, que cada año organiza en celebración del Mes del Orgullo. La convocatoria está abierta para artistas, activistas e investigadores que deseen participar en la exposición, a inaugurarse en julio.

Después de siete años de trabajo, la iniciativa ha logrado consolidarse como el principal espacio de diálogo sobre la diversidad de género desde el arte contemporáneo en la capital.

Para este año, el enfoque que proponen los organizadores es ‘Archivos Lgbtiq+’, como una reflexión alrededor de la memoria de la comunidad.

Acogida
La edición del año pasado, bajo el tema ‘Utopía’, destacó por la gran recepción de parte del público. La propuesta arrojó una variedad de interpretaciones desde la subjetividad de cada artista o colectivo. La muestra se nutrió también con la visión de artistas extranjeros.

“Esta imaginación sobre un mundo posible o una situación ideal puede nacer desde una cuestión muy íntima, de cómo me imagino que el mundo puede estar mejor, pero también de una cuestión colectiva. Lo rico de la exposición fue que había muchas formas de entender esa utopía”, dice Roberto Vega, quien debuta este año como investigador del CAC y organizador de la muestra.

Para ‘Utopías’, el CAC recibió alrededor de 60 propuestas. Actualmente, 20 postulantes ya están participando en la nueva selección. El plazo para la inscripción es el 6 de junio. Los temas son receptados vía correo electrónico.

Puntos de vista
Gledys Macías, mediador comunitario de la Fundación Museos de la Ciudad y activista Lgbtiq+, ha dado seguimiento a la exposición por cuatro ediciones y recalca que lo fundamental de su realización es la reflexión que estos temas suscitan en la población.

“Se transforma en un espacio de activismo, pero también es una mirada hacia el interior mismo de la comunidad Lgbti”, afirma.

EL DATO
La información sobre la convocatoria está disponible en www.centrodeartecontemporaneo.gob.ec “Lo interesante de la exposición es que los artistas –muchos son Lgbti- analicen desde su situación y hagan una crítica hacia la misma comunidad. Eso genera reflexiones muy interesantes que tal vez, como colectivos, no alcanzamos a ver”.

La exposición busca llegar a la población, no solo mediante la visibilización de problemáticas como la violencia y la represión, sino también a través del entendimiento de la diversidad desde una perspectiva más amplia que la práctica sexual.

“La edición anterior llamó mucho la atención por trabajos que hablaban de las emociones, las vivencias personales, con un enfoque que tocaba el corazón de las personas. La gente hizo conexión con la parte afectiva”, comenta Macías.

Memoria
En ‘Utopía’, la presencia del archivo de prensa escrita creado por Leticia Rojas revivió la lucha de la comunidad Lgbtiq+ en tiempos en que la homosexualidad era penalizada en el país. El efecto que provocó la propuesta pretende replicarse a gran escala en la nueva edición.

“Uno de los problemas internos de la comunidad es que no tenemos referentes a los que adherirnos o cuestionarlos, porque no se han dado estos espacios para reflexionar sobre nuestra propia memoria”, dice Macías, y añade que poner en valor el despliegue de archivos Lgbtiq+ es un aporte trascendental para el arte y el activismo nacional.

“Es interesante pensar qué nomás podría ser un archivo”, señala Vega. Más que limitarse a documentos y artículos de prensa, la exposición aspira a abarcar todo tipo de formatos que sirvan como “contenedores de memoria”.

“La idea del archivo puede expandirse mucho más, podemos empezar a hacer relaciones con fotografías, videos, audios, objetos, diarios, bitácoras. Esta memoria puede estar contenida de muchas maneras”, añade el investigador. (AA)

FRASE

Si pensamos en que el archivo es un contenedor de memoria, este se puede expandir hacia muchas posibilidades”. Roberto Vega, investigador del CAC.