Niños y adolescentes piden desterrar la discriminación

SOCIEDAD. Niños y adolescentes esmeraldeños, piden desterrar la discriminación, este mal comportamiento hace daño a las personas.
SOCIEDAD. Niños y adolescentes esmeraldeños, piden desterrar la discriminación, este mal comportamiento hace daño a las personas.

Que el color de piel, etnia, discapacidad, forma de ser o de vestirse, no es una causa para que las personas discriminen a los demás, es como piensan niños y adolescentes esmeraldeños que fueron entrevistados por Diario La Hora.

Ellos tienen muy claro el concepto de discriminación, incluso, afirman que en algún momento han sido marginados y criticados por su etnia, por ello, piden a las personas desterrar este mal comportamiento del ser humano.

Que todas las personas tienen derecho a ser como ellos se sientan bien, opina Andrés Endara, de 12 años, pues, las condiciones físicas o intelectuales no son factores para ser cuestionados, porque cada ser humano es tal como Dios le permitió nacer.

En el entorno familiar

Criticó que una personas rechace a otra solo por no compartir los mismos pensamientos y no ser iguales, piensa que quienes discriminan a los demás, quizás es porque lo aprenden en el entorno familiar.

“Hay ciertos padres que condicionan a sus hijos a no juntarse y compartir con quienes no son de su misma condición social o económica, pero eso está mal”, afirma en niño.

Para Romina Caicedo, de 11 años, el ser negro, blanco, de cualquier otro color de piel, no es una causa para ser menospreciado por los demás, acción que no se debe hacer, pues, quienes son víctimas de aquello sufren por el alejamiento.

Llevarse bien con todos sus amigos, vecinos y compañeros de trabajo, escuela o colegio propone Romina, explicando que la sociedad no debe discriminar a nadie por ninguna circunstancia.

Cambiar de actitud

“Para quienes se creen superior a los demás, les pido que cambien su actitud, porque todas las personas somos iguales. Los padres deben enseñar a sus hijos a no ofender a los demás, sino que siempre debe existir el respeto”, pide la alumna de primaria.

La solidaridad y la buena amistad, propone Deysi Chillambo, para desterrar la discriminación, pues, las personas siempre deben mantener una buena relación con todos.

Ella considera que en vez de ofender o criticar a los demás, los ciudadanos deben tener un buen comportamiento, dedicarse a los estudios y alejarse de vicios como la drogadicción y el alcoholismo.

La adolescente, Ninoska Sandoval, de 13 años, afirman que todos los seres humanos son una creación de Dios, explicando que las personas no deben ser cuestionadas o marginadas por su religión, color de piel o forma de vestir.

‘Malas personas’

“Las personas no somos perfectas, pero cada una tiene sus virtudes, entonces, no debe existir la discriminación, porque es algo que hace daños al ser humano”, dijo.

Como personas malas, califica Andrés Gámez, a quienes discriminan a los demás por su etnia o condición social, pues, eso hace sentir mal a la víctima.

Sostiene que ser gordo, flaco, negro o blanco es la condición que Dios le ha dado a cada persona, y el ser humano es feliz de esa forma, entonces, nadie tiene el derecho de hacerlo sentir mal por su forma de ser.

“Ser discriminado le baja el autoestima a cualquier persona, en mi caso me ha pasado, pero ello, pido a la población no discriminar a nadie, pues, al ser humano hay que aceptarlo tal como es”, manifestó Andrés, de 12 años.

‘Corregirse ellos primero’

Para Jean Pierre Angulo, de 16 años, las personas son buenas para criticar a los demás, pero no ven su mal proceder, considera que para cuestionar las acciones de otros, primero deben corregir su mal comportamiento.

“Cada quien es feliz a su manera, por ello, nadie puede cuestionar o criticar a los demás. Quienes lo hacen, es porque no tienen una buena educación ni formación en el hogar”, comentó el adolescente.

¿Qué es la discriminación?

La discriminación es toda aquella acción u omisión realizada por personas, grupos o instituciones que produce y reproduce desigualdades en el acceso a recursos y oportunidades tan disímiles como comida, servicios de salud, educación o empleo, en favor o en contra de otras personas, grupos o instituciones.

También es el acto de separar o formar grupos de personas a partir de criterios determinados. La violación de la igualdad de los derechos humanos por edad, color, altura, capacidades, etnia, familia, género, características genéticas, estado marital, nacionalidad, raza, religión, sexo y orientación sexual.