‘Memorias de un hijueputa’, por Oswaldo Paz y Miño

Es una novela del colombiano Fernando Vallejo, autor de otros estupendos libros como ‘La puta de Babilonia’

Para los lectores que se reconocen como insensatos, los que van a contracorriente, los que no justifican los atracos de los gobernantes y los que no hacen cola en el pensamiento trasnochado del fanatismo religioso o del nacionalista, les recomiendo ‘Memorias de un hijueputa’, que tiene 186 páginas cargadas de calibre.

Es una novela del colombiano Fernando Vallejo, autor de otros estupendos libros como ‘La puta de Babilonia’, el que, como el que hoy comentamos, no fue granjeado amigos, sino todo lo contrario.

El memorial novelado de Vallejo es aplicable a muchos países, en los que se comprobó , que la “democracia es el pernicioso sistema electoral de unos corruptos que van tras el botín del poder, pero que le permite, por lo menos al ciudadano, escoger entre el malo y el peor; que de los tres poderes sobran el legislativo y el judicial pues con el ejecutivo basta, ya que se puede comprar a los otros dos”.

‘Memorias de un hijueputa’, literatura que revienta como granada en el rostro, no solo de los políticos corruptos, sino de aquellos que están enfermos de nacionalismos o son parte del oscurantismo religioso, que no cesan en sus intentonas de imponer moralina en temas que tienen que ver con los Derechos Humanos, con aquello que se relaciona con la libertad, la tolerancia y la solidaridad. Fernando Vallejo irreverente, mordaz, lúcido y valiente, vuelve a Colombia luego de 47 años y dice: “Vine a joder a los hijueputas de este país” , pero se queda corto el libro, lo hace con otros hijos de furcia, de otros lugares también.