Economía en los hogares preocupa a los adolescentes

ECONOMÍA. Situación de hogares esmeraldeños preocupa a adolescentes. Analizan que las leyes se creen a favor de sus habitantes.
ECONOMÍA. Situación de hogares esmeraldeños preocupa a adolescentes. Analizan que las leyes se creen a favor de sus habitantes.

Tras el desalojo de varios puestos informales en Esmeraldas, un proyecto de reubicación anticipado habría determinado con exactitud el destino de decenas de familias que vivían de los ingresos generados a través de la venta de ropa, accesorios, alimentos, entre otros.

La falta de ello alertó a la ciudadanía que en su afán de no crear caos o revueltas, apaciguó su malestar, aún sin decidir o realizar una estrategia para volver a tener un ingreso fijo en sus hogares.

Muchos de los comerciantes son padres de familia, tienen de dos a tres hijos que estudian, por lo que la realidad de ellos no está decidida y adolescentes opinan también sobre la situación de sus familias, en donde la preocupación está a la vuelta de la esquina.

Roger Ramos, de 15 años, piensa en la falta de un trabajo estable de su padre, quien labora como obrero, no en un lugar fijo o bien remunerado, sino en pequeños proyectos dentro de algunos hogares.

Carrera universitaria

Lo que gana es suficiente para la alimentación y los gastos que él requiere para el colegio, sabe que sus padres hacen lo imposible por mandarlo a clases, aunque trata de no preocuparse su cabeza está consciente que la situación cada vez se agudiza más, por lo que intenta no gastar en útiles (necesario) para no causar malestar al interior de su hogar.

Otra de las aristas que manejan los adolescentes, se ubica en su futuro inmediato al término de su bachillerato, muchos quieren seguir estudiando, porque en la actualidad las metas claras se sobreponen a una licenciatura, ingeniería y de ahí, a un postgrado.

Pero antes de imaginarse ese camino profesional, María José Cuero, de 15 años, primero debe preguntar al interior de su hogar, si sus padres la apoyarán en los primeros años, tiempo en el que pueda conseguir un trabajo y así seguir con sus sueños.

“La situación no está para imaginarse seguir estudiando”, lamenta la adolescente, que espera conseguir una beca o una ayuda, con la cual lleve adelante su proyecto de vida. Es importante, añade Leidy Martínez, de 15 años, inicie un cambio en el cantón, en donde las fuentes de empleo se creen primero y luego exista una condición, que se respete la mano de obra esmeraldeña.

Visión a futuro

No todos los hogares pueden costear las tres comidas al día, en muchas se sufre, advierte Matheus Corozo, de 15 años. A su corta edad, los problemas financieros en su vivienda están presentes, jamás se dejan de lado, pues, ello asegura que la cotidianidad siga su camino, entre ir al colegio, su hermana menor al jardín y su madre estirando el dinero para toda la semana.

En otro caso, Josué Quintero, de 17 años, establece las ideas claras para los nuevos gobernantes, lo que se quiere, direcciona, es una ordenanza o una ley para que las empresas puedan llegar, invertir en Esmeraldas y con ello, dar trabajo a sus habitantes.

Niega rotundamente, que el sector privado venga y traiga su propio personal, más ello seguiría hundiendo a la ciudad, en el abandono y las revueltas, algo que no quiere que suceda, pueden convertirse en realidad.

‘ASÍ QUIERO

A MI CIUDAD’

“Hay que mejorar la educación, los valores y la cultura aquí se ha perdido, por ello añoro mi Esmeraldas con buenos ciudadanos que respeten a las demás personas”.

María José Cuero, 15 años,

Estudiante de la Bachillerato.

“Que ya no exista basura en las calles, que exista un buen líder para la ciudad, que las drogas salgan de las instituciones educativas y se busque un progreso para sus ciudadanos”.

Leidy Martínez, 15 años,

Estudiante de la Bachillerato.

“Esmeraldas tiene que estar limpio, con más basureros en las calles, que sus ciudadanos respeten la hora de recolección para que se pueda avanzar”.

Josué Quintero, 17 años,

Estudiante de la Bachillerato.

“Una urbe donde se respete la vida del animal, que existan centro donde se los puedan llevar y que también se los esterilice o puedan adoptar”.

Roger Ramos, 15 años,

Estudiante de la Bachillerato.

“Debemos potenciar nuestros lugares turísticos, adecuar los sitios y recomponerlos, quiero a mi ciudad llena de turistas que reactiven la economía”.

Reichel Perdomo, 16 años,

Estudiante de bachillerato.

“Me gustaría que todos los espacios daños que hay en Esmeraldas, sean reparados. Que los turistas lleguen y existan locales con precios módicos para que puedan retornar”.

Keyler Rodríguez, 17 años,

Estudiante de la Bachillerato.