Después de tres años, seis familias de escasos recursos que se mantenían viviendo en carpas y en viviendas afectadas por el terremoto del 16 de abril de 2016, en la parroquia Tonsupa al sur de la provincia de Esmeraldas, fueron beneficiadas con la entrega de casas emergentes de bambú.
Las viviendas son de 35 metros cuadrados, cuentan con una estructura sismo resistente y desmontable, que permite hacer ampliaciones según las necesidades de extensión de cada familia y además, permite moverlas hacia otro lugar si fuese necesario reubicarlas.
Las viviendas fueron elaboradas con materiales amigables pero resistentes al ambiente, con el propósito de sobrellevar las condiciones climáticas de la zona costera de Esmeraldas. Ofrecen un espacio físico confortable y seguro para los beneficiarios.
Ropa y juguetes
Las casas de bambú fueron armadas en un día con la asistencia técnica de la Fundación Raíz, y el apoyo de voluntarios, en esta ocasión, funcionarios de World Vision Ecuador, que trabajan en la oficina nacional ubicada en Quito.
Narcisa Vivas, madre de un joven con discapacidad, una de las beneficiarias con las soluciones habitacionales, señaló, que la mencionada organización, a más de dotarles de un hogar, les entregó donaciones de ropa y juguetes, así como kits de higiene que contaban con insumos para el aseo personal.
Gabriela Benítez, responsable de las casas de bambú informó, que la inversión de las casas fue cerca de 18.000 mil dólares, quien a la vez dijo que para la construcción de las casas, la organización gestiona donaciones individuales a través de su programa Bamboo Action.
Las viviendas fueron entregadas a las jefas de hogar de cada familia, con el propósito de prevenir escenarios en los que existan vulneración al derecho de niñas y niños de contar con una vivienda digna y techo seguro.