Lo primero que hicieron 4.102 tortugas golfinas al romper el huevo enterrado en la arena por sus madres en el área de conservación de playa de Las Palmas, en la ciudad de Esmeraldas, fue dirigirse hacia el mar. Ese sentido primitivo las llevó a su habitad natural.
Con el paso de los años regresan al mismo lugar a repetir el ciclo de vida. Funcionarios del Ministerio del Ambiente se dieron cuenta de aquello, por lo que desde el 13 de junio de 2008 declararon 538 metros lineales de la parte norte la playa como zona de conservación. A lo largo de esa ‘arena muerta’, existen otras cinco líneas de ‘frontera’.
Junto a la de conservación está la mixta de 128 metros, donde pueden estar los bañistas y deportistas. Más allá está una zona de 300 metros exclusiva para los deportistas. En esa área, los fines de semana se realizan partidos de fútbol palero por campeonatos de infantiles y de adultos.
Playa accesible
Dentro del mapa de zonificación del que tiene conceso municipal y de los ministerios de Turismo y Ambiente, se dejó una de 200×120 metros lineales para realizar los actos de concentración masiva sobre la arena.
También se consideró a los amantes del deporte extremo sobre el mar. Pese a que el océano se muestra calmado la mayoría de los días del año y sus olas son manejables, existe un espacio donde se puede practicar el surf.
En 2017 se organizó la sexta fecha del Circuito Latinoamericano de Surf, que fue parte del pre-clasificatorio para los Juegos Panamericanos de ‘Lima 2019’.
Dentro de el 1.7 kilómetro de playa están dos espacios particulares: uno para los nadadores y sus mascotas, y otro para las personas con discapacidad. Ambos espacios suman 400 metros, según el mapa de zonificación de la playa del balneario de Las Palmas.
Recomendaciones
En la administración municipal anterior se contaba con sillas de ruedas flotantes que posibilitan tanto el movimiento por la playa como la entrada al agua a personas de reducida movilidad.
“A las sillas las encontramos obsoletas porque no recibieron el mantenimiento adecuado”, aseguró la actual directora de Turismo Municipal, Antonina Vivas, quien precisa que, pese a ello, se mantiene el área de accesibilidad.
Desde el Ministerio del Ambiente hacen algunas recomendaciones para la convivencia del hombre con la fauna junto al mar. Piden no ingresar con carros, no realizar actividades comerciales o pesqueras, no andar con animales domésticos, mantenerse a unos 50 centímetros de los nidos de las tortugas, entre otras.
Lo primero que hicieron 4.102 tortugas golfinas al romper el huevo enterrado en la arena por sus madres en el área de conservación de playa de Las Palmas, en la ciudad de Esmeraldas, fue dirigirse hacia el mar. Ese sentido primitivo las llevó a su habitad natural.
Con el paso de los años regresan al mismo lugar a repetir el ciclo de vida. Funcionarios del Ministerio del Ambiente se dieron cuenta de aquello, por lo que desde el 13 de junio de 2008 declararon 538 metros lineales de la parte norte la playa como zona de conservación. A lo largo de esa ‘arena muerta’, existen otras cinco líneas de ‘frontera’.
Junto a la de conservación está la mixta de 128 metros, donde pueden estar los bañistas y deportistas. Más allá está una zona de 300 metros exclusiva para los deportistas. En esa área, los fines de semana se realizan partidos de fútbol palero por campeonatos de infantiles y de adultos.
Playa accesible
Dentro del mapa de zonificación del que tiene conceso municipal y de los ministerios de Turismo y Ambiente, se dejó una de 200×120 metros lineales para realizar los actos de concentración masiva sobre la arena.
También se consideró a los amantes del deporte extremo sobre el mar. Pese a que el océano se muestra calmado la mayoría de los días del año y sus olas son manejables, existe un espacio donde se puede practicar el surf.
En 2017 se organizó la sexta fecha del Circuito Latinoamericano de Surf, que fue parte del pre-clasificatorio para los Juegos Panamericanos de ‘Lima 2019’.
Dentro de el 1.7 kilómetro de playa están dos espacios particulares: uno para los nadadores y sus mascotas, y otro para las personas con discapacidad. Ambos espacios suman 400 metros, según el mapa de zonificación de la playa del balneario de Las Palmas.
Recomendaciones
En la administración municipal anterior se contaba con sillas de ruedas flotantes que posibilitan tanto el movimiento por la playa como la entrada al agua a personas de reducida movilidad.
“A las sillas las encontramos obsoletas porque no recibieron el mantenimiento adecuado”, aseguró la actual directora de Turismo Municipal, Antonina Vivas, quien precisa que, pese a ello, se mantiene el área de accesibilidad.
Desde el Ministerio del Ambiente hacen algunas recomendaciones para la convivencia del hombre con la fauna junto al mar. Piden no ingresar con carros, no realizar actividades comerciales o pesqueras, no andar con animales domésticos, mantenerse a unos 50 centímetros de los nidos de las tortugas, entre otras.
Lo primero que hicieron 4.102 tortugas golfinas al romper el huevo enterrado en la arena por sus madres en el área de conservación de playa de Las Palmas, en la ciudad de Esmeraldas, fue dirigirse hacia el mar. Ese sentido primitivo las llevó a su habitad natural.
Con el paso de los años regresan al mismo lugar a repetir el ciclo de vida. Funcionarios del Ministerio del Ambiente se dieron cuenta de aquello, por lo que desde el 13 de junio de 2008 declararon 538 metros lineales de la parte norte la playa como zona de conservación. A lo largo de esa ‘arena muerta’, existen otras cinco líneas de ‘frontera’.
Junto a la de conservación está la mixta de 128 metros, donde pueden estar los bañistas y deportistas. Más allá está una zona de 300 metros exclusiva para los deportistas. En esa área, los fines de semana se realizan partidos de fútbol palero por campeonatos de infantiles y de adultos.
Playa accesible
Dentro del mapa de zonificación del que tiene conceso municipal y de los ministerios de Turismo y Ambiente, se dejó una de 200×120 metros lineales para realizar los actos de concentración masiva sobre la arena.
También se consideró a los amantes del deporte extremo sobre el mar. Pese a que el océano se muestra calmado la mayoría de los días del año y sus olas son manejables, existe un espacio donde se puede practicar el surf.
En 2017 se organizó la sexta fecha del Circuito Latinoamericano de Surf, que fue parte del pre-clasificatorio para los Juegos Panamericanos de ‘Lima 2019’.
Dentro de el 1.7 kilómetro de playa están dos espacios particulares: uno para los nadadores y sus mascotas, y otro para las personas con discapacidad. Ambos espacios suman 400 metros, según el mapa de zonificación de la playa del balneario de Las Palmas.
Recomendaciones
En la administración municipal anterior se contaba con sillas de ruedas flotantes que posibilitan tanto el movimiento por la playa como la entrada al agua a personas de reducida movilidad.
“A las sillas las encontramos obsoletas porque no recibieron el mantenimiento adecuado”, aseguró la actual directora de Turismo Municipal, Antonina Vivas, quien precisa que, pese a ello, se mantiene el área de accesibilidad.
Desde el Ministerio del Ambiente hacen algunas recomendaciones para la convivencia del hombre con la fauna junto al mar. Piden no ingresar con carros, no realizar actividades comerciales o pesqueras, no andar con animales domésticos, mantenerse a unos 50 centímetros de los nidos de las tortugas, entre otras.
Lo primero que hicieron 4.102 tortugas golfinas al romper el huevo enterrado en la arena por sus madres en el área de conservación de playa de Las Palmas, en la ciudad de Esmeraldas, fue dirigirse hacia el mar. Ese sentido primitivo las llevó a su habitad natural.
Con el paso de los años regresan al mismo lugar a repetir el ciclo de vida. Funcionarios del Ministerio del Ambiente se dieron cuenta de aquello, por lo que desde el 13 de junio de 2008 declararon 538 metros lineales de la parte norte la playa como zona de conservación. A lo largo de esa ‘arena muerta’, existen otras cinco líneas de ‘frontera’.
Junto a la de conservación está la mixta de 128 metros, donde pueden estar los bañistas y deportistas. Más allá está una zona de 300 metros exclusiva para los deportistas. En esa área, los fines de semana se realizan partidos de fútbol palero por campeonatos de infantiles y de adultos.
Playa accesible
Dentro del mapa de zonificación del que tiene conceso municipal y de los ministerios de Turismo y Ambiente, se dejó una de 200×120 metros lineales para realizar los actos de concentración masiva sobre la arena.
También se consideró a los amantes del deporte extremo sobre el mar. Pese a que el océano se muestra calmado la mayoría de los días del año y sus olas son manejables, existe un espacio donde se puede practicar el surf.
En 2017 se organizó la sexta fecha del Circuito Latinoamericano de Surf, que fue parte del pre-clasificatorio para los Juegos Panamericanos de ‘Lima 2019’.
Dentro de el 1.7 kilómetro de playa están dos espacios particulares: uno para los nadadores y sus mascotas, y otro para las personas con discapacidad. Ambos espacios suman 400 metros, según el mapa de zonificación de la playa del balneario de Las Palmas.
Recomendaciones
En la administración municipal anterior se contaba con sillas de ruedas flotantes que posibilitan tanto el movimiento por la playa como la entrada al agua a personas de reducida movilidad.
“A las sillas las encontramos obsoletas porque no recibieron el mantenimiento adecuado”, aseguró la actual directora de Turismo Municipal, Antonina Vivas, quien precisa que, pese a ello, se mantiene el área de accesibilidad.
Desde el Ministerio del Ambiente hacen algunas recomendaciones para la convivencia del hombre con la fauna junto al mar. Piden no ingresar con carros, no realizar actividades comerciales o pesqueras, no andar con animales domésticos, mantenerse a unos 50 centímetros de los nidos de las tortugas, entre otras.