CARLOS CONCHA JIJÓN
No hay duda ni justificación, cuando decimos que ha existido negligencia en la conservación y protección de los bienes patrimoniales culturales de Esmeraldas, pues, los hechos hablan de esa injustificada realidad. Mucho se ha dicho sobre la inercia en su preservación, llevándonos a sentir dolor por la falta de iniciativa, para preservar parte de nuestra historia.
Se ha mencionado que han existido recursos; algunos manifiestan de partidas de 600.000 dólares anuales para el Gobierno Cantonal, institución delegada en el cuidado y preservación de los patrimonios. Sin embargo, constatamos la triste realidad resumida en el abandono y ultraje, pero seguimos soportando conmovidos con golpes de conciencia, reclamando justicia por nuestros patrimonios. Por ahí se habla que el Gobierno Cantonal anterior recibió como dádiva 74.000 dólares y que iban a ser invertidos en algo, que no sabemos.
Tengo un documento del Director de Patrimonio Cultural, administración del alcalde Lenín Lara, en el que asevera: “… que el busto del coronel Luis Vargas Torres fue retirado en la administración del alcalde Ernesto Estupiñán, violando la Ley de Patrimonio Cultural de la Nación…”. El mismo Director escribe: “… La Dirección de Patrimonio Cultural recomendó a su autoridad, recuperar este espacio público y colocar un busto y recuperar la plazoleta, para lo cual propuso el nombre del Dr. Franklin Tello Mercado…”.
De estas aseveraciones se desprende que el Director también siguió el ejemplo violatorio de sacar el busto y aún, fue más allá, cuando logró colocar el busto de su elegido en el sitio del héroe. Considero que él como Director debió exigir el retorno del busto del heroico Coronel. Mas, ahora, después que se violó doblemente la Ley, ofendiendo la memoria de Luis Vargas Torres, le queda al Gobierno Cantonal actual, con testimonio irrefutable, la obligatoriedad legal de retornar el busto a su lugar, que seguirá siendo Patrimonio Cultural de la Nación, por decreto 4418 del 23-07-1996.
CARLOS CONCHA JIJÓN
No hay duda ni justificación, cuando decimos que ha existido negligencia en la conservación y protección de los bienes patrimoniales culturales de Esmeraldas, pues, los hechos hablan de esa injustificada realidad. Mucho se ha dicho sobre la inercia en su preservación, llevándonos a sentir dolor por la falta de iniciativa, para preservar parte de nuestra historia.
Se ha mencionado que han existido recursos; algunos manifiestan de partidas de 600.000 dólares anuales para el Gobierno Cantonal, institución delegada en el cuidado y preservación de los patrimonios. Sin embargo, constatamos la triste realidad resumida en el abandono y ultraje, pero seguimos soportando conmovidos con golpes de conciencia, reclamando justicia por nuestros patrimonios. Por ahí se habla que el Gobierno Cantonal anterior recibió como dádiva 74.000 dólares y que iban a ser invertidos en algo, que no sabemos.
Tengo un documento del Director de Patrimonio Cultural, administración del alcalde Lenín Lara, en el que asevera: “… que el busto del coronel Luis Vargas Torres fue retirado en la administración del alcalde Ernesto Estupiñán, violando la Ley de Patrimonio Cultural de la Nación…”. El mismo Director escribe: “… La Dirección de Patrimonio Cultural recomendó a su autoridad, recuperar este espacio público y colocar un busto y recuperar la plazoleta, para lo cual propuso el nombre del Dr. Franklin Tello Mercado…”.
De estas aseveraciones se desprende que el Director también siguió el ejemplo violatorio de sacar el busto y aún, fue más allá, cuando logró colocar el busto de su elegido en el sitio del héroe. Considero que él como Director debió exigir el retorno del busto del heroico Coronel. Mas, ahora, después que se violó doblemente la Ley, ofendiendo la memoria de Luis Vargas Torres, le queda al Gobierno Cantonal actual, con testimonio irrefutable, la obligatoriedad legal de retornar el busto a su lugar, que seguirá siendo Patrimonio Cultural de la Nación, por decreto 4418 del 23-07-1996.
CARLOS CONCHA JIJÓN
No hay duda ni justificación, cuando decimos que ha existido negligencia en la conservación y protección de los bienes patrimoniales culturales de Esmeraldas, pues, los hechos hablan de esa injustificada realidad. Mucho se ha dicho sobre la inercia en su preservación, llevándonos a sentir dolor por la falta de iniciativa, para preservar parte de nuestra historia.
Se ha mencionado que han existido recursos; algunos manifiestan de partidas de 600.000 dólares anuales para el Gobierno Cantonal, institución delegada en el cuidado y preservación de los patrimonios. Sin embargo, constatamos la triste realidad resumida en el abandono y ultraje, pero seguimos soportando conmovidos con golpes de conciencia, reclamando justicia por nuestros patrimonios. Por ahí se habla que el Gobierno Cantonal anterior recibió como dádiva 74.000 dólares y que iban a ser invertidos en algo, que no sabemos.
Tengo un documento del Director de Patrimonio Cultural, administración del alcalde Lenín Lara, en el que asevera: “… que el busto del coronel Luis Vargas Torres fue retirado en la administración del alcalde Ernesto Estupiñán, violando la Ley de Patrimonio Cultural de la Nación…”. El mismo Director escribe: “… La Dirección de Patrimonio Cultural recomendó a su autoridad, recuperar este espacio público y colocar un busto y recuperar la plazoleta, para lo cual propuso el nombre del Dr. Franklin Tello Mercado…”.
De estas aseveraciones se desprende que el Director también siguió el ejemplo violatorio de sacar el busto y aún, fue más allá, cuando logró colocar el busto de su elegido en el sitio del héroe. Considero que él como Director debió exigir el retorno del busto del heroico Coronel. Mas, ahora, después que se violó doblemente la Ley, ofendiendo la memoria de Luis Vargas Torres, le queda al Gobierno Cantonal actual, con testimonio irrefutable, la obligatoriedad legal de retornar el busto a su lugar, que seguirá siendo Patrimonio Cultural de la Nación, por decreto 4418 del 23-07-1996.
CARLOS CONCHA JIJÓN
No hay duda ni justificación, cuando decimos que ha existido negligencia en la conservación y protección de los bienes patrimoniales culturales de Esmeraldas, pues, los hechos hablan de esa injustificada realidad. Mucho se ha dicho sobre la inercia en su preservación, llevándonos a sentir dolor por la falta de iniciativa, para preservar parte de nuestra historia.
Se ha mencionado que han existido recursos; algunos manifiestan de partidas de 600.000 dólares anuales para el Gobierno Cantonal, institución delegada en el cuidado y preservación de los patrimonios. Sin embargo, constatamos la triste realidad resumida en el abandono y ultraje, pero seguimos soportando conmovidos con golpes de conciencia, reclamando justicia por nuestros patrimonios. Por ahí se habla que el Gobierno Cantonal anterior recibió como dádiva 74.000 dólares y que iban a ser invertidos en algo, que no sabemos.
Tengo un documento del Director de Patrimonio Cultural, administración del alcalde Lenín Lara, en el que asevera: “… que el busto del coronel Luis Vargas Torres fue retirado en la administración del alcalde Ernesto Estupiñán, violando la Ley de Patrimonio Cultural de la Nación…”. El mismo Director escribe: “… La Dirección de Patrimonio Cultural recomendó a su autoridad, recuperar este espacio público y colocar un busto y recuperar la plazoleta, para lo cual propuso el nombre del Dr. Franklin Tello Mercado…”.
De estas aseveraciones se desprende que el Director también siguió el ejemplo violatorio de sacar el busto y aún, fue más allá, cuando logró colocar el busto de su elegido en el sitio del héroe. Considero que él como Director debió exigir el retorno del busto del heroico Coronel. Mas, ahora, después que se violó doblemente la Ley, ofendiendo la memoria de Luis Vargas Torres, le queda al Gobierno Cantonal actual, con testimonio irrefutable, la obligatoriedad legal de retornar el busto a su lugar, que seguirá siendo Patrimonio Cultural de la Nación, por decreto 4418 del 23-07-1996.