Ecuador, potencialmente turístico

POR: Oswaldo Echeverría

La condición de país megadiverso, multiétnico y pluricultural posibilita al Ecuador para convertirse en un destino turístico de reconocimiento global, sin embargo la realidad de hoy es que dista mucho de las exigencias competitivas para llamarse Potencia Turística, debido a la débil especialización en el ramo, limitados estándares de calidad en los servicios y bajo flujo de visitantes extranjeros al año, en comparación solo con destinos medianamente destacados en el mundo.

Aunque se han asignado elevados presupuestos en promoción turística internacional en los últimos años y el país ha recibido reconocimientos como los de la World Travel Awards WTA en 2015 (Ecuador como Destino Verde y Quito Destino Líder de la Región), la realidad es que el flujo está muy lejos de ser el de una potencia turística.

En 2014 la Organización Mundial de Turismo OMT registró 1.133 millones de viajeros internacionales, el mismo año que en Ecuador superamos por primera vez los 1,5 millones de turistas extranjeros, esto es el 0,13% de participación en la cuota de mercado frente al resto del mundo, muy por debajo de los diez países más visitados, a la cabeza Francia (84 mill), EEUU (75 mill) y España (65 mill).

Es necesario entonces poner los pies en la tierra para reconocer todo el trabajo y responsabilidad que los ecuatorianos debemos asumir para cambiar esta realidad. La sola presencia de atractivos en un destino, no lo convierte en turístico; se requiere mucho más que promoción, hace falta la especialización temática del territorio, la formación profesional del recurso humano, el desarrollo infraestructural, técnico y tecnológico, además de inversiones empresariales orientadas a diseñar productos que garanticen experiencias extraordinarias de visita en todos los destinos internos; hasta tanto el Ecuador solo se quedará en la condición de Potencialmente Turístico.