Cotacachi vive a plenitud la fiesta grande

DANZANTES. La organización comunitaria prevaleció en la celebración del Inti Raymi.
DANZANTES. La organización comunitaria prevaleció en la celebración del Inti Raymi.
SEGURIDAD. Personal policial se encarga de evitar enfrentamientos entre comunidades altas y bajas.
SEGURIDAD. Personal policial se encarga de evitar enfrentamientos entre comunidades altas y bajas.
SIMBOLISMO. Las costumbres del pueblo indígena en Cotacachi prevalecen y se ha fortalecido en lo cultural.
SIMBOLISMO. Las costumbres del pueblo indígena en Cotacachi prevalecen y se ha fortalecido en lo cultural.

COTACACHI

Se prepararon desde hace dos meses, cuando los frutos de la tierra y el espíritu de rebeldía de unos 16 mil personas de 30 comunidades del pueblo Cotacachi se alistan para la toma simbólica de la plaza, lugar que les perteneció antes de que llegaran los colonizadores españoles y los sometieran a sus costumbres religiosas.

Las mujeres son la base del sostenimiento de la cultura. Ellas son las más hacendosas en la recolección, en la siembra, en la cosecha y en la preparación de la exquisita chicha de jora, el mote y la colada. En las tres comidas básicas para su alimentación utilizan el maíz, grano que lo acompaña en la sobrevivencia de su cultura alimentaria.

Los bordados de sus blusas de colores vivos también son el producto de sus hábiles manos, que siempre están en movimiento casi a lo largo del año. Sus abuelas, madres y hermanas mayores asumen esa responsabilidad de generación en generación, para que sus costumbres solo se modifiquen con el tiempo, pero no se extingan.

Sus compañeros y esposos preparan la tierra para hacer lo que les corresponde en el cultivo y producción del maíz, papas, habas, trigo, la cebada, fréjol, mellocos, ocas, quinua entre otros productos.

La fiesta

Para el hatun puncha o fiesta grande, que tuvo su máxima expresión desde las 11:00 de ayer, con la llegada de los primeros danzantes de las comunidades de la Calera y San José, la comida y la chicha estaba lista para compartir entre sus familiares, vecinos, compadres, amigos e invitados, que forman su comunidad, núcleo de fuertes lazos que les ha permitido resistir.

Con el sonido majestuosos del churo, que de por sí convoca a movilizarse desde su comunidades hasta la plaza central; los zamarros de pelaje fino de hasta 500,00 dólares; los sombreros negros enormes construidos de diferentes materiales; los instrumentos musicales como la flauta, la guitarra, tambores y bombos que entonan melodías similares; y, el derroche de energía, retumba y estremece el ambiente de las cuatro cuadras del Parque Central (plaza) de la ciudad.

El dato
La celebración inició el viernes por la noche y continúa hasta finales de mes.
Unos 500 policías, educados y preparados para controlar algún tipo de desmanes, comprenden la euforia de la celebración, ante rítmicos zapateos, abren el paso para que continúen bailando su música y los constantes gritos de libertad.

“Este parque fue el lugar donde vivía el pueblo Cotacachi, hace más de 500 años. Donde está ahora la Iglesia estaban las tolas (cementerio), lugar sagrado donde despedían a sus familiares con ceremonias rituales”, explica Alfonso Morales, presidente de la Unorcac, quien coordina con los capitanes, presidentes de las comunidades y entidades de seguridad para evitar enfrentamientos que están a punto de desbordar.

Toda una semana de celebración

Entre ayer y hoy las comunidades altas y bajas confluyen en la plaza central para ratificar su presencia, danzar y mostrar su rebeldía, desde las 11:00 hasta las 19:00. Los danzantes descansarán este martes y miércoles. El jueves por la noche se vivirán las vísperas de San Pedro con el baile en las diferentes comunidades y los rituales en las vertientes de agua.

Volverán a zapatear en la plaza para las fiestas de ‘San Pedro’ el sábado 29 y domingo 30 de junio. Finalmente, las mujeres se reúnen y hacen su toma de la plaza el domingo 01 de julio desde las 13:00 hasta las 22:00. Con esto se cierra la celebración que une a las comunidades y que se ha convertido en un referente cultural a donde acuden visitantes de otras ciudades y provincias. (CHRW)

TomE nota

La toma de la plaza se la realiza de manera alternada entre comunidades altas y bajas. 1 hora con 15 minutos se le asigna a cada una.