Ya no sienten paz en Pimampiro

Seguridad. Personal policial realizó un operativo el último fin de semana para que los bares y dicotecas cumplan con el horario establecido.
Seguridad. Personal policial realizó un operativo el último fin de semana para que los bares y dicotecas cumplan con el horario establecido.

Los hechos delictivos no cesan en el cantón Pimampiro y eso preocupa a la población.

Redacción PIMAMPIRO.

La mayoría de familias de los diferentes barrios y comunidades del cantón Pimampiro, muestran su indignación por el creciente número de robos a domicilios, en las vías, negocios y a ciudadanos que caminan en las calles durante las noches y madrugadas.

La policía hace su esfuerzo por mejorar sus operativos activando los botones de seguridad, ojos de águila, patrullajes y acciones de inteligencia, pero según los habitantes no hay resultados alentadores.

El pasado 3 de mayo, ante las denuncias sobre varios actos delictivos cometidos por personas extrañas al cantón, la Gobernación realizó el Gabinete de Seguridad Provincial en el que participaron las principales autoridades y el alcalde Oscar Narváez, quien reconoció que hasta esa fecha no contaba con un plan de seguridad.

Situación

Luego de conocer el estado de la situación, con base a informes de la Policía Nacional y de otras entidades encargadas de la seguridad ciudadana, se comprometieron a desplegar estrategias específicas y efectivas, sin embargo cerca de cuatro meses después la situación no ha cambiado, a criterio de numerosos perjudicados y agredidos.

Desde la parte oficial se aduce que las estadísticas no reflejan el clamor ciudadano, porque no presentan la denuncia oportuna a la Policía. Por parte de la ciudadanía se afirmó que ese es un trámite embarazoso, donde pierden tiempo y dinero. Reclamaron la falta de un fiscal en el cantón.

Hechos

Hace pocas semanas un joven que transitaba por las calles Amazonas y Velasco, en horas de la noche, fue asaltado por un sujeto quien amenazándolo con un cuchillo le robó su celular. Pese a que presentó la denuncia a la UPC, minutos después, no lograron detenerle.

Otro ciudadano de unos 26 años de edad, quien habría sido abordado por un grupo de sujetos con acento venezolano, de forma violenta, para que les diera dinero y su teléfono, al oponer resistencia recibió varios cortes en sus dos manos que lo tuvieron incapacitado para laborar varios días.

“Nos da mucho dolor de la situación política y económica por la que atraviesan los hermanos venezolanos, pero no podemos tolerar que a más de recibir la solidaridad, la ayuda económica, con alimentos y trabajo como jornaleros o en servicios, tengan un comportamiento hostil y violento”, aseguró M.B., una mujer que les regaló un tanque de gas y una cocineta.

Otros casos

La propietaria de una tienda de abastos localizada en el centro de la ciudad, denunció que ciudadanos extranjeros llegaron hasta el local armados de un cuchillo y le pidieron que les entregue alimentos y dinero.

Son múltiples las amenazas e intimidaciones que ha sufrido la ciudadanía que tienen negocios, a quienes les han insultado y les han exigido comida.

Los estibadores en el mercado de transferencia denunciaron que para transportar bultos de productos de un camión a otro cobran 0,25 centavos, pero los extranjeros lo hacen por menos. “Hubo un comerciante que le hizo cargar un camión de habas, alverja y gavetas de otros productos, lo llevó a Quito, le dio la comida y le pagó 10, 00 dólares. Esto significa una estafa al trabajador, pero las autoridades no están controlando. Se quejan que no hay denuncias, pues deben investigar y actuar”, aseguró M.A.G.

Censo por la seguridad

Margarita Hurtado, jefa Política de Pimampiro, confirmó que entre miércoles y jueves desde las cinco de la tarde fueron llamados los ciudadanos venezolanos con el fin de levantar un censo voluntario, para verificar el número de extranjeros que residen en Pimampiro, quienes poseen documentos, qué trabajo realizan y, tomar en cuenta a que se dedican los que no tienen una ocupación.

Sobre la seguridad y delincuencia sostuvo que “denuncias no existen, solo comentarios. Se ha revisado algunos videos en los que no se reconoce bien a los actores”, pero la autoridad reconoció que sí hay zozobra en el ambiente de un cantón caracterizado por sus solidaridad, trabajo y tranquilidad.

“Hay robo de jóvenes en horas de la noche y madrugada, pero aclaró que la mayoría de estos delitos son cometidos a bordo de motos y vehículos”, resaltó la autoridad. (CHRW)