¿Algunos asambleístas imponen pagos a sus asesores por el puesto?

TRABAJO. Tanto en las comisiones, como en el trabajo en sus oficinas, los trabajadores apoyan a los asambleístas.
TRABAJO. Tanto en las comisiones, como en el trabajo en sus oficinas, los trabajadores apoyan a los asambleístas.

Es un ‘secreto a voces’ y se conoce como ‘impuesto al trabajo’. Piden que la Contraloría audite las cuentas.

El asambleísta Fabricio Villamar solicitará pasado mañana, ante el Pleno de la Asamblea, que se vote un proyecto de resolución que permita a la Contraloría auditar las cuentas y las transferencias bancarias del personal de apoyo a los legisladores.

Villamar justificó su pedido diciendo que es “un secreto a voces” que ciertos asambleístas les piden a sus asesores y colaboradores que les paguen parte de su sueldo como “contribuciones al partido” o “para cancelar gastos personales, como compras y cuotas de vehículos”.

“Pedimos que la Contraloría idee un mecanismo para verificar cada una de las cuentas que los empleados del Parlamento registramos para que nos depositen. Con una auditoría, podemos hacer cruces de información para ver quién está cobrando qué”, puntualizó Villamar.

Por los pasillos de la Asamblea, desde hace años, se comenta de estas prácticas entre los asambleístas y sus asesores. “Tenemos registrado con correos electrónicos, grabaciones y recibos de transferencias, los casos de seis exasesores que fueron presionados para dar parte de sus salarios. Cada una de estas pruebas sustentan nuestro proyecto de resolución”, comentó Pablo Santillán, abogado, funcionario de carrera del Legislativo y promotor de este recurso.

13
comisiones tiene la Asamblea. Desde montos de 400 dólares para “ayudar al partido”, hasta pagos de las cuotas de vehículos de alta gama, pasando por pagos de almuerzos, citas médicas y bolsas con comida, están registrados en un expediente que mantiene Santillán.

“Una vez que hicimos el anuncio de este proyecto por redes sociales, nos llovieron mensajes de personas, con nombre y apellido, dispuestas a participar en la investigación y dejar constancia de estos abusos”, agregó.

Contexto
Basados en el precepto constitucional donde se indica que los derechos de los trabajadores son inamovibles, tanto el asambleísta Villamar como Santillán están seguros de que el proyecto se aprobará. “Es un primer paso, sabemos que muchos asambleístas, para no dejar rastro, cobran sus cuotas a los asesores en efectivo”, aseguró Santillán.

500
dólaresson las cuotas más abultadas que han registrado.Por su parte, el asambleísta Eliseo Azuero (independiente) considera que, dentro del proyecto de resolución, debe estar estipulado que cada asesor que denuncie esta situación, “debe tener garantizado su trabajo, al menos, por un año. Esto para evitar posibles represalias”.

De confirmarse, los involucrados podrían sostener sanciones por extorsión y procedimientos administrativos dentro del Pleno. (JDC)

Cómo operaban los cobros
° El Consejo de Administración Legislativa (CAL) estipula que cada asambleísta puede tener en nómina a cuatro personas: dos asesores y dos administrativos. Además, cada comisión puede tener hasta seis personas empleadas. Del supuesto cobro de comisiones de parte de los asambleístas a personal bajo su cargo existen denuncias desde dentro de las comisiones hasta en las oficinas administrativas.

Muchos de los denunciantes son exempleados que, tras pasar entre dos o tres meses en el trabajo, colocan su denuncia porque no pueden cumplir con las cuotas que les exigen. Esto también se le conoce en el foro interno como ‘impuesto al trabajo’.

“Una vez que el asesor o el empleado se establece, las cuotas van aumentando. Tenemos recibos de transferencias donde los asambleístas, en un período de tiempo, pasan de recibir entre 100 y 200 hasta 500 dólares. También contamos con fotos de cuando reciben el pago en efectivo dentro de las oficinas que mantienen en las comisiones”, asegura el denunciante Pablo Santillán.