Redacción OTAVALO
Cinco vendedores fueron autorizados por las autoridades correspondientes, para expender fuegos pirotécnicos durante la temporada de fin de año en Otavalo. En las afueras del Mercado 24 Mayo se encuentra ubicados los puestos, en donde la ciudadanía podrá abastecerse de esta materia para la quema de monigotes y despedir el año viejo, esto tomando las precauciones necesarias.
América Morales, quien se dedica a esta actividad desde hace varios años, manifestó que esta es una tradición familiar. “Por nuestra parte hemos sido socializados y capacitados para la venta de fuegos pirotécnicos, con la respectiva autorización del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas; este material es inofensivo, pero siempre tiene que haber la supervisión de un adulto, igualmente está prohibida la venta a menores de edad”, aseguró Morales.
Por su parte Darwin Collahuazo, otro de los vendedores autorizados, mencionó que para este año, hizo una inversión de 1.500 dólares en este material, por lo que espera poder en estos días vender el producto para poder recuperar su capital. “Tenemos una variedad de fuegos artificiales desde 50 centavos hasta las tortas de 60 dólares; nosotros también estamos capacitados para dar las debidas indicaciones a nuestros clientes y no tengan problemas en el manejo correcto de este material”, señaló.
El mal uso de estos artefactos explosivos puede ocasionar quemaduras, pérdida de extremidades, lesiones físicas, auditivas, así como irritación de los ojos y vías respiratorias. Por eso la importancia de adquirir estos productos donde comerciantes que cuenten con los respectivos permisos y la venta la realizan exclusivamente a personas adultas.
Precauciones
La forma más segura de disfrutar de los fuegos artificiales es en una exhibición hecha por profesionales de la pirotecnia o a su vez pro personas adultas. Algunas personas tiran cohetes en casa y encienden bengalas y hacen sus propios fuegos artificiales, pero esto es una actividad peligrosa. Mucha de la gente que se lesiona cada año no es precisamente la que tira sus propios cohetes o fuegos artificiales sino la que está a su alrededor.
El material pirotécnico no debe guardarse en los bolsillos del pantalón, puesto que el calor del cuerpo puede encenderlos y ocasionar quemaduras. Tampoco se recomienda detonar varios a la vez, porque se puede ocasionar una explosión.
Por otro lado, si el material pirotécnico no enciende, no debemos insistir en encenderlo y mojarlo con agua para luego desecharlo. Es importante tener a mano un extintor, un botiquín, y los teléfonos de emergencia en caso de accidentes. (PMHR)