Redacción IMBABURA
Uno de los casos, como muchos que se suscitan en la provincia sobre agresión intrafamiliar, se evidenció en Antonio Ante. El cónyuge de la denunciante se sobrepasó, atentando contra su vida y la de sus hijos, violentándole físicamente y verbalmente, para lo cual personal policial debió actuar y detener al infractor.
El caso se suscitó en el barrio Las Palmas. Al llegar los gendarmes hallaron a la mujer de 37 años de edad con lágrimas en su ojos y nerviosa. Momentos antes, Carlos C., su conviviente, con aliento a licor y con reclamos de celos procedió a lanzar patadas y puñetazos sobre la víctima. Sus dos hijas menores de edad asustadas al observar ese comportamiento comunicaron a otros familiares, quienes decidieron denunciarlo.
El agresor fue detenido, ingresado al Centro de Detención Provisional y puesto a órdenes de la autoridad competente para su sanción en relación a su conducta violenta.