Robo en la terminal de buses de Otavalo

AUDIENCIA. La semana pasada el hombre finalmente fue judicializado tras haberse mantenido prófugo.
AUDIENCIA. La semana pasada el hombre finalmente fue judicializado tras haberse mantenido prófugo.

Redacciòn IBARRA

Apenas el año pasado, José María B. fue capturado por los efectivos policiales tras haberse extendido una boleta de aprehensión en su contra por ser sospechoso de un presunto delito de violación.

Las investigaciones se desarrollaron a partir de la denuncia de una niña de seis años de edad, quien en 2016 refirió haber sido abusada sexualmente por varias personas, entre ellas el hoy procesado, el mismo que fue plenamente reconocido por la víctima. Hecho que se registró en Cotacachi. Su búsqueda demoró más de dos años, hasta que a finales de 2018 fue atrapado por agentes de la Policía Nacional y la semana pasada fue condenado.

Diligencia

El involucrado enfrentó al Tribunal Único de Garantías Penales de Imbabura. Enrique Cáceres, abogado defensor del acusado, aseguró que en la exposición de los hechos que él realizó logró mostrar ante los jurisconsultos que su cliente no logró violentar a la niña y que únicamente hubo un intento sexual que no se concretó. “Logramos que se le otorguen solo cinco años y tres meses de sentencia a José, pues la Fiscalía solicitaba una condena de 22 años como pena máxima y sumado a eso siete años adicionales, es decir 29 de sentencia, por el agravante de tratarse de una niña que tiene discapacidad”, explicó el profesional.

Dentro de la audiencia se conocieron detalles sobre el acontecimiento, exponiéndose además, que la niña supuestamente no solo fue abusada por José, sino por el hermano de la pequeña y otras personas. “Esta niña fue abusada por varios sujetos en diferentes circunstancias, incluso mantenía juegos sexuales con su propio hermano lográndose encontrar vestigios de este hecho. La víctima es hija de un hogar disfuncional, pues sus padres son personas que se dedican a la ingesta de bebidas alcohólicas y por eso la niña pasaba en la calle expuesta a todo peligro”, insistió el abogado.

Antecedente

El caso fue expuesto ante las autoridades una vez que al descuido en el cuidado de la menor, fuera entregada a una casa hogar en Ibarra, en donde tras de que la menor de edad ganara confianza con la psicóloga extranjera que labora en el establecimiento de acogida, le relatara cómo fue abusada y violada por varias personas. Desde entonces se puso el hecho en conocimiento de las autoridades y la Policía logró dar con su paradero para ponerlo a órdenes de las autoridades.

Apelarán

Según Cáceres, hubo varias atenuantes que no fueron consideradas por el Tribunal Penal, las mismas que podían haber amenorado la sentencia, por lo que aplicarán a la siguiente instancia judicial para lograr menguar los años a los que fue condenado. (MAGC)