Investigan violento crimen en las minas de Buenos Aires

DECESO. Así fueron envueltos los restos del venezolano. Gran parte de sus órganos se encontraban fuera de su organismo por la violencia con la que fue asesinado.
DECESO. Así fueron envueltos los restos del venezolano. Gran parte de sus órganos se encontraban fuera de su organismo por la violencia con la que fue asesinado.

Redacción URCUQUÍ

Con los órganos expuestos y con seis impactos de bala, fue encontrado ayer el cuerpo sin vida de Nanyeneerth Alejandro Fernández Marín, venezolano de 23 años. El cadáver estaba en estado de descomposición.

El cuerpo yacía entre la maleza del sector conocido como ‘La Visera’, perteneciente a la parroquia de Buenos Aires, en Urcuquí.

Brutal asesinato

Quienes lo hallaron, sostuvieron que del ciudadano desprendía un fuerte hedor y se encontraba en un avanzado estado de descomposición. A simple vista, se podía notar la agresividad con la que fue asesinado.

Su tórax presentaba una herida cortante, que iba desde el pecho hasta el ombligo, por lo que las vísceras del occiso quedaron expuestas. Asimismo, el hombre tenía seis balazos, dos de ellos en la cabeza, uno en la espalda, uno en el tórax y dos más que se podían apreciar en lo que quedaba del abdomen del sujeto.

Horrorizados con el macabro hallazgo, quienes lo encontraron, envolvieron sus restos en una cobija de color azul, para luego ser puestos sobre una especie de camilla, improvisada de tablones, que posteriormente fue embarcada en el balde de una camioneta marca Chevrolet, color vino tinto, de placa OBA – 6189, hasta llegar a otro sitio conocido como ‘La Cadena’.

Procedimiento

Hasta ese lugar, personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Extorsión y Secuestro (Dinased) de Imbabura, fue convocado.

Los uniformados llegaron al sitio, en donde se constató que, efectivamente, presentaba el paso de proyectiles en su humanidad, además de una gran herida hecha con un arma cortopunzante.

Agentes de la Unidad de Criminalística (UCM) también llegaron al sitio y trasladaron los restos hasta el Hospital San Vicente de Paúl (HSVP), en Ibarra.

Se investiga

El paso del cuerpo sin vida en la parte posterior del automotor, resulta una escena común en la localidad. Los moradores del lugar observaron el procedimiento policial sin mayor asombro, por la familiaridad con este tipo de sucesos en el lugar, desde la aparición de la minería ilegal.

Extraoficialmente se conoció que la causa del violento asesinato habría sido un ajuste de cuentas, pero el dato no fue confirmado. Tampoco se ratificó si el hecho tendría relación con el enfrentamiento armado registrado la madrugada del domingo, pero las investigaciones policiales apuntan a que no, preliminarmente.

Por lo tanto, las razones reales por las que se cometió el horrible crimen se investigan. (MAGC)

Crímenes impunes

Como este, otros casos similares se han registrado en la zona desde el 2018, cuando inició ‘la fiebre del oro’, hasta la actualidad.

Una de las primeras muertes violentas, oficialmente conocida en el sector durante el año pasado, fue la de Melitón Merchancano Cuajiboy, quien terminó con un disparo y su cuerpo apareció maniatado sobre una carretilla, en medio pueblo.

Desde entonces, crímenes muy similares y unos más violentos que otros se han suscitado en la zona minera. Por ninguno de estos casos existen personas privadas de su libertad.