Accidente deja un menor de edad herido

ACTO. Momentos en que el agente de tránsito Garzón calmaba al infante accidentado, hasta el arribo de la ayuda médica al lugar.
ACTO. Momentos en que el agente de tránsito Garzón calmaba al infante accidentado, hasta el arribo de la ayuda médica al lugar.

Redacción IBARRA

Con los ojos abiertos, ensangrentado y asustado quedó un infante de aproximadamente seis años. El pequeño viajaba a bordo de una buseta que chocó contra un bus de servicio público en el cruce de las calles Sucre y Mejía.

El chofer de la buseta color blanco, al parecer, no se percató del disco PARE que se encuentra ubicado en la calle Mejía (secundaria), intentando cruzar, cuando el bus pasó en su vía de ascenso en el tramo Sucre (principal) generándose el incidente. El fuerte estruendo fue escuchado por los moradores del sector, quienes de inmediato salieron a observar lo acontecido. Dentro de la buseta estaba el padre de la víctima, quien se movilizaba con otros menores de edad y su pequeño hijo quien resultó con una herida sangrante en la cabeza. Cuidadosamente fue sacado del chocado carro y colocado sobre la calzada hasta que las unidades de atención médica llegaran. Agentes de tránsito arribaron y controlaron el tráfico en el sitio, así como la aglomeración de las personas que rodeaban al pequeño.

Hubo más afectados

Yolanda Arévalo, pasajera del bus, aseguró que siempre toma el bus que cubre la ruta hacia El Milagro, y ayer no fue la excepción. “Subíamos por esta calle normalmente, la velocidad normal del señor chofer, pero pasa que este carro (buseta), sale de golpe y nosotros pegamos un chillido, porque no le dio tiempo de esquivarse ni frenar, no pudo hacer nada, otro carro venía del otro lado y no pudo maniobrar, no fue culpa del señor del bus. Yo también estoy golpeada en las rodillas, otra chica le salía sangre de la nariz. El bus no venía lleno, pero tampoco éramos pocos los ocupantes, así que todos nos lesionamos cuando ocurrió el choque”, mencionó la testigo.

Herido hizo una promesa

La llamada de auxilio no se hizo esperar. Sin embargo, más de 15 minutos demoró la llegada de la ambulancia del Cuerpo de Bomberos de Ibarra(CBI) al sitio del incidente, mientras que el infante permanecía en la calzada inmóvil. El agente de tránsito Jonathan Garzón se recostó junto al asustado niño quien intentaba llorar por el impacto del acontecimiento, pero el uniformado le mencionaba que a cambio de mantenerse tranquilo y no cerrar los ojos, en la noche le llevaría a ver una película animada en el cine, a lo que el infante respondió positivamente y se mantuvo despierto y menos inquieto hasta que finalmente los paramédicos llegaron.

El acto del agente fue felicitado por quienes se encontraban en el lugar, pues logró estabilizar emocionalmente al pequeño. “Nos hicimos una promesa, le dije que si lograba estar tranquilo y ponía todo de su parte para recuperarse le llevaría a ver una película y es algo que lo cumplo”, mencionó. Mientras tanto, los carros fueron llevados al centro de retención vehicular. (MAGC)

Molestia por tardanza de ambulancia

Quienes presenciaron el percance, desesperados preguntaban dónde estaba la ambulancia, pues mencionaban que el niño sea llevado en un taxi, lo que fue evitado por los agentes de tránsito y una agente Policial del UMO que se encontraba en el sitio, pues debían ser los paramédicos los encargados del traslado del menor. Desde el ECU – 911 se explicó que se realizaron las coordinaciones para que una ambulancia del Ministerio de Salud Pública avance al sitio, pero todas se encontraban en otras emergencias, por lo que se solicitó al Cuerpo de Bomberos el arribo, pero demoraron en su llegada al lugar del accidente, pese a estar a escasas cuadras el cuartel principal, lo que causó molestia entre los presentes. (MAGC)