Jóvenes son los más propensos a suicidios

COMPAÑÍA. Las personas deben unir sus lazos familiares para evitar la depresión y tomar decisiones fatales.
COMPAÑÍA. Las personas deben unir sus lazos familiares para evitar la depresión y tomar decisiones fatales.

Redacción IBARRA

En un video que la Policía Nacional publicó en redes sociales, se observa a una mujer parada al filo de un techo. Tiene la cabeza agachada, está silenciosa. El viento sopla a su alrededor. Hay angustia en la gente que mira la escena. De pronto, aparece una capitana de la institución. Se le acerca despacio hasta que logra sostenerla del brazo. La abraza y la chica llora. Ambas se alejan del lugar evitando el suicidio.

Esta escena es una de las que tuvo un final feliz. Sin embargo, hay otras que no han corrido con la misma suerte.

El psicólogo Rolando Maspud, responsable zonal de Salud Mental de la Coordinación Zonal 1, indica que es multicausal el tema del suicidio. Por ejemplo, obedece a factores familiares, como la falta de confianza entre padres e hijos. O la mala comunicación.

“También el tema de tecnología, redes sociales. Y lo que más tenemos es las familias que están en situaciones disfuncionales. Es decir, que solo viven con un miembro de la familia”, explica el profesional.

Prevención

El psicólogo del Ministerio de Salud indica que las personas que sufran de depresión deben tener un estilo de vida diferente. “Primero en el tema de sentirte feliz, de compartir lazos familiares, de escuchar a tus hijos, especialmente en el periodo que dejan la niñez y pasan a la adolescencia. Aquí van a necesitar mucho acompañamiento familiar”.

Menciona, además, que muchas veces las personas se enfocan en las edades de 0 a 5 años o de 5 a 10 años, sin saber que de los 15 hasta los 19 años es la etapa más crítica. En este lapso, el joven pelea con su cuerpo como con su parte emocional. Y al mismo tiempo puede existir la depresión. Por eso dice que es necesario que tenga mucha comunicación y amor en su núcleo familiar.

Sector poblacional

Maspud indica que los familiares o amigos más cercanos pueden tener idea de las intenciones de la persona afectada. “Porque todo comienza con una insinuación suicida, previo al acto consumado. El factor para identificar son los niveles de tristeza, ansiedad, transformado en un trastorno como la depresión”.

Por eso, dice, el trabajo del Ministerio de Salud Pública consiste en captar a adolescentes y personas que estén en cualquier rango de edad, con problemas de depresión o ansiedad.

“En cifras, la población más vulnerable está entre los 15 y 19 años, sin exceptuar el adulto joven, que comprende los 20 a los 43 años”, agrega.

En Imbabura, indica el psicólogo, tienen causales de emergencia en el Hospital San Vicente de Paúl, donde llegan los pacientes o las víctimas.

En una estadística, en lo que va del año, se hablaría en la población imbabureña de un promedio de que cada tres días hay un intento de suicidio, especialmente en comunidades rurales, con consumo de sustancias tóxicas. (PTEG)

Unos 800.000 suicidios ocurren en el mundo por año

Con unas 800.000 personas que ponen fin a sus días cada año en todo el mundo, es decir, una cada 40 segundos, las cifras son consideradas alarmantes a pesar de que la tasa de suicidio per cápita está disminuyendo, según indicó la OMS en este mes.

En un informe publicado un día antes del Día Mundial de Prevención del Suicidio, la OMS afirma que, entre 2010 y 2016, la tasa global cayó un 9,8% en promedio, desde un descenso de 19,6% en la región del Pacífico occidental hasta del 4,2% en la de Asia suroriental.

En la región de las Américas, que ha registrado un alza del 6% de suicidios, los países con mayor índice son: Guyana, Surinam, Uruguay, Estados Unidos y El Salvador. En algunos casos, el fácil acceso a las armas es un factor determinante.

Los métodos de suicidio más corrientes son el ahorcamiento, envenenamiento con pesticidas y las armas de fuego.

Según la OMS, reducir el acceso a los pesticidas puede incidir en la baja de las tasas de suicidio, como se ha demostrado en Sri Lanka y Corea del Sur. En el primero de estos países la caída fue del 70%. (DLH)