Abusó de su cuñada y fue condenado

REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.
REFERENCIA. El sospechoso era esposo de la hermana mayor de la víctima, y abusaba en silencio de la joven desde que era una niña.

Redacción IBARRA

Miguel Alejandro P.P. recibió 16 años de cárcel, luego de que los jueces del Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, lo declarara responsable de haber violado a la hermana menor de su conviviente. Años transcurrieron hasta que este delito sea sancionado, pues apenas en 2018, la víctima pudo dar a conocer los pormenores de las agresiones de las que fue víctima por parte del marido de su hermana.

Según se desprende del cuerpo procesal de este hecho, la víctima que actualmente tiene 14 años de edad, habría sido violentada en 2010, y nuevamente a la edad de 13 años, que fue cuando decidió poner un estado en su equipo celular, alertando sobre tener intenciones de acabar con su vida (suicidarse), mensaje que alarmó a sus familiares quienes de inmediato preguntaron a la joven qué era lo que le sucedía, para querer tomar tal decisión.

Rompió el silencio

Fue entonces, que la muchacha soltó en llanto y uno a uno explicó a sus allegados sobre los dos abusos sexuales de los que fue víctima por parte de su cuñado. La joven aseguró que no acusó antes a su agresor por miedo, tristeza por su hermana y por “no causar problemas”, más el trauma que dichos actos generaron en ella, habrían hecho que su paciencia llegara al límite. Con este argumento, la denuncia fue puesta ante las autoridades competentes, quienes tras los exámenes forenses realizados en la humanidad de la joven, se constató la violación, por lo que la justicia ordenó la inmediata captura del sujeto, quien fue apresado para ser procesado. Sin embargo, al haber sido un hecho delictivo iniciado antes de la vigencia del Código Orgánico Integral Penal (COIP), el caso se desarrolló en base al Código Penal anterior, bajo la tipificación de Violencia Sexual.

Detalles

Al final de la diligencia, y tras la presentación y testimonios necesarios para el desarrollo de la misma, los jueces dictaminaron la responsabilidad del sujeto en este acontecimiento, sentenciándolo con la pena más alta impuesta en el código pasado. El hombre se encuentra actualmente, purgando su condena en la penitenciaría de Ibarra. (MAGC)

Redacción IBARRA

Miguel Alejandro P.P. recibió 16 años de cárcel, luego de que los jueces del Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, lo declarara responsable de haber violado a la hermana menor de su conviviente. Años transcurrieron hasta que este delito sea sancionado, pues apenas en 2018, la víctima pudo dar a conocer los pormenores de las agresiones de las que fue víctima por parte del marido de su hermana.

Según se desprende del cuerpo procesal de este hecho, la víctima que actualmente tiene 14 años de edad, habría sido violentada en 2010, y nuevamente a la edad de 13 años, que fue cuando decidió poner un estado en su equipo celular, alertando sobre tener intenciones de acabar con su vida (suicidarse), mensaje que alarmó a sus familiares quienes de inmediato preguntaron a la joven qué era lo que le sucedía, para querer tomar tal decisión.

Rompió el silencio

Fue entonces, que la muchacha soltó en llanto y uno a uno explicó a sus allegados sobre los dos abusos sexuales de los que fue víctima por parte de su cuñado. La joven aseguró que no acusó antes a su agresor por miedo, tristeza por su hermana y por “no causar problemas”, más el trauma que dichos actos generaron en ella, habrían hecho que su paciencia llegara al límite. Con este argumento, la denuncia fue puesta ante las autoridades competentes, quienes tras los exámenes forenses realizados en la humanidad de la joven, se constató la violación, por lo que la justicia ordenó la inmediata captura del sujeto, quien fue apresado para ser procesado. Sin embargo, al haber sido un hecho delictivo iniciado antes de la vigencia del Código Orgánico Integral Penal (COIP), el caso se desarrolló en base al Código Penal anterior, bajo la tipificación de Violencia Sexual.

Detalles

Al final de la diligencia, y tras la presentación y testimonios necesarios para el desarrollo de la misma, los jueces dictaminaron la responsabilidad del sujeto en este acontecimiento, sentenciándolo con la pena más alta impuesta en el código pasado. El hombre se encuentra actualmente, purgando su condena en la penitenciaría de Ibarra. (MAGC)

Redacción IBARRA

Miguel Alejandro P.P. recibió 16 años de cárcel, luego de que los jueces del Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, lo declarara responsable de haber violado a la hermana menor de su conviviente. Años transcurrieron hasta que este delito sea sancionado, pues apenas en 2018, la víctima pudo dar a conocer los pormenores de las agresiones de las que fue víctima por parte del marido de su hermana.

Según se desprende del cuerpo procesal de este hecho, la víctima que actualmente tiene 14 años de edad, habría sido violentada en 2010, y nuevamente a la edad de 13 años, que fue cuando decidió poner un estado en su equipo celular, alertando sobre tener intenciones de acabar con su vida (suicidarse), mensaje que alarmó a sus familiares quienes de inmediato preguntaron a la joven qué era lo que le sucedía, para querer tomar tal decisión.

Rompió el silencio

Fue entonces, que la muchacha soltó en llanto y uno a uno explicó a sus allegados sobre los dos abusos sexuales de los que fue víctima por parte de su cuñado. La joven aseguró que no acusó antes a su agresor por miedo, tristeza por su hermana y por “no causar problemas”, más el trauma que dichos actos generaron en ella, habrían hecho que su paciencia llegara al límite. Con este argumento, la denuncia fue puesta ante las autoridades competentes, quienes tras los exámenes forenses realizados en la humanidad de la joven, se constató la violación, por lo que la justicia ordenó la inmediata captura del sujeto, quien fue apresado para ser procesado. Sin embargo, al haber sido un hecho delictivo iniciado antes de la vigencia del Código Orgánico Integral Penal (COIP), el caso se desarrolló en base al Código Penal anterior, bajo la tipificación de Violencia Sexual.

Detalles

Al final de la diligencia, y tras la presentación y testimonios necesarios para el desarrollo de la misma, los jueces dictaminaron la responsabilidad del sujeto en este acontecimiento, sentenciándolo con la pena más alta impuesta en el código pasado. El hombre se encuentra actualmente, purgando su condena en la penitenciaría de Ibarra. (MAGC)

Redacción IBARRA

Miguel Alejandro P.P. recibió 16 años de cárcel, luego de que los jueces del Tribunal de Garantías Penales de Imbabura, lo declarara responsable de haber violado a la hermana menor de su conviviente. Años transcurrieron hasta que este delito sea sancionado, pues apenas en 2018, la víctima pudo dar a conocer los pormenores de las agresiones de las que fue víctima por parte del marido de su hermana.

Según se desprende del cuerpo procesal de este hecho, la víctima que actualmente tiene 14 años de edad, habría sido violentada en 2010, y nuevamente a la edad de 13 años, que fue cuando decidió poner un estado en su equipo celular, alertando sobre tener intenciones de acabar con su vida (suicidarse), mensaje que alarmó a sus familiares quienes de inmediato preguntaron a la joven qué era lo que le sucedía, para querer tomar tal decisión.

Rompió el silencio

Fue entonces, que la muchacha soltó en llanto y uno a uno explicó a sus allegados sobre los dos abusos sexuales de los que fue víctima por parte de su cuñado. La joven aseguró que no acusó antes a su agresor por miedo, tristeza por su hermana y por “no causar problemas”, más el trauma que dichos actos generaron en ella, habrían hecho que su paciencia llegara al límite. Con este argumento, la denuncia fue puesta ante las autoridades competentes, quienes tras los exámenes forenses realizados en la humanidad de la joven, se constató la violación, por lo que la justicia ordenó la inmediata captura del sujeto, quien fue apresado para ser procesado. Sin embargo, al haber sido un hecho delictivo iniciado antes de la vigencia del Código Orgánico Integral Penal (COIP), el caso se desarrolló en base al Código Penal anterior, bajo la tipificación de Violencia Sexual.

Detalles

Al final de la diligencia, y tras la presentación y testimonios necesarios para el desarrollo de la misma, los jueces dictaminaron la responsabilidad del sujeto en este acontecimiento, sentenciándolo con la pena más alta impuesta en el código pasado. El hombre se encuentra actualmente, purgando su condena en la penitenciaría de Ibarra. (MAGC)