Buscan que la empresa de Pesillo – Imbabura sea pública y comunitaria

Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.
Organización. 12 de 15 regionales del Pesillo Imbabura asistieron a la reunión para tratar sobre el estatuto.

Redacciòn IBARRA

De acuerdo a los términos de referencia del proyecto se indica que la administración y operación del Pesillo Imbabura sea a través de una empresa pública mancomunada con participación comunitaria, eso ha generado malestar a las comunidades que forman parte del proyecto, porque a decir de ellos, se les deja fuera de la toma de decisiones.

En una reunión realizada ayer en la planta baja de las oficinas de Senagua, las 12 regionales que asistieron, abordaron su estatuto para así poder conformarse como personería jurídica y pelear por la administración comunitaria del Pesillo Imbabura.

Proyección

Fernando de la Torre, dirigente (transitorio) del Pesillo Imbabura, sostuvo que desde el cinco de noviembre se ha pedido a la Mancomunidad que se de la administración Pública y Comunitaria. “No queremos hacernos dueños en las ciudades, pero si en nuestra jurisdicción queremos administrar. No queremos ser solo partícipes, queremos también ser parte de la toma de decisiones porque es nuestro proyecto”, agregó.

Se indicó que por parte de las regionales se buscará una reunión de trabajo con los representantes de la Mancomunidad, para que se reconozca los más de 24 años que las juntas de aguas han estado en la lucha por sacar a flote este proyecto. “Nos están quitando el derecho a nuestras tierras, a la administración del agua que nosotros hemos gestionado”, dijo De la Torre.

La propuesta de la administración público-comunitaria, se hará llegar a la Mancomunidad del Pesillo Imbabura, Banco de Desarrollo y la Agencia Francesa para el Desarrollo. “La Constitución del Estado nos ampara para poder ejercer este derecho”.

Más versiones

Ángel Campuéz, concejal de Cayambe, y delegado de la Regional Unopac, expuso que en la Fábrica Imbabura, hace años atrás se buscó estratégicamente dar la figura pública-comunitaria, pero no se la concretó, por lo que ahora lucharán para que la administración sea también comunitaria. “Apoyaremos a nuestras organizaciones, habrá divergencias, pero que el pensar diferente no nos haga enemigos”, resaltó.

Por su parte, Gustavo Yacelga, presidente de la Regional Sumayaku (Otavalo), dijo que se hará un solo frente para trabajar tanto con la Mancomunidad y las Regionales. “Pero para eso debemos ser legales, y con ello luchar para que la gestión también sea comunitaria. Así como dirigentes no solo queremos pedir sino también arrimar el hombro en la toma de decisiones”.

No impedirán trabajos

De acuerdo a de la Torre, se retoman los trabajos el 16 de diciembre y en 18 meses se busca terminar el anillo principal del anillo vial del Pesillo. Por otro lado, aclaró que no van a paralizar u obstaculizar los trabajos a desarrollarse durante los próximos meses. “Siempre vamos a estar de acuerdo que se ejecute a la brevedad posible; pero en la consultoría del modelo de gestión que va a demorar cerca de 8 meses, vamos a luchar para corregir este modelo que sea público-comunitaria”, concluyó. (FCDL)

Redacciòn IBARRA

De acuerdo a los términos de referencia del proyecto se indica que la administración y operación del Pesillo Imbabura sea a través de una empresa pública mancomunada con participación comunitaria, eso ha generado malestar a las comunidades que forman parte del proyecto, porque a decir de ellos, se les deja fuera de la toma de decisiones.

En una reunión realizada ayer en la planta baja de las oficinas de Senagua, las 12 regionales que asistieron, abordaron su estatuto para así poder conformarse como personería jurídica y pelear por la administración comunitaria del Pesillo Imbabura.

Proyección

Fernando de la Torre, dirigente (transitorio) del Pesillo Imbabura, sostuvo que desde el cinco de noviembre se ha pedido a la Mancomunidad que se de la administración Pública y Comunitaria. “No queremos hacernos dueños en las ciudades, pero si en nuestra jurisdicción queremos administrar. No queremos ser solo partícipes, queremos también ser parte de la toma de decisiones porque es nuestro proyecto”, agregó.

Se indicó que por parte de las regionales se buscará una reunión de trabajo con los representantes de la Mancomunidad, para que se reconozca los más de 24 años que las juntas de aguas han estado en la lucha por sacar a flote este proyecto. “Nos están quitando el derecho a nuestras tierras, a la administración del agua que nosotros hemos gestionado”, dijo De la Torre.

La propuesta de la administración público-comunitaria, se hará llegar a la Mancomunidad del Pesillo Imbabura, Banco de Desarrollo y la Agencia Francesa para el Desarrollo. “La Constitución del Estado nos ampara para poder ejercer este derecho”.

Más versiones

Ángel Campuéz, concejal de Cayambe, y delegado de la Regional Unopac, expuso que en la Fábrica Imbabura, hace años atrás se buscó estratégicamente dar la figura pública-comunitaria, pero no se la concretó, por lo que ahora lucharán para que la administración sea también comunitaria. “Apoyaremos a nuestras organizaciones, habrá divergencias, pero que el pensar diferente no nos haga enemigos”, resaltó.

Por su parte, Gustavo Yacelga, presidente de la Regional Sumayaku (Otavalo), dijo que se hará un solo frente para trabajar tanto con la Mancomunidad y las Regionales. “Pero para eso debemos ser legales, y con ello luchar para que la gestión también sea comunitaria. Así como dirigentes no solo queremos pedir sino también arrimar el hombro en la toma de decisiones”.

No impedirán trabajos

De acuerdo a de la Torre, se retoman los trabajos el 16 de diciembre y en 18 meses se busca terminar el anillo principal del anillo vial del Pesillo. Por otro lado, aclaró que no van a paralizar u obstaculizar los trabajos a desarrollarse durante los próximos meses. “Siempre vamos a estar de acuerdo que se ejecute a la brevedad posible; pero en la consultoría del modelo de gestión que va a demorar cerca de 8 meses, vamos a luchar para corregir este modelo que sea público-comunitaria”, concluyó. (FCDL)

Redacciòn IBARRA

De acuerdo a los términos de referencia del proyecto se indica que la administración y operación del Pesillo Imbabura sea a través de una empresa pública mancomunada con participación comunitaria, eso ha generado malestar a las comunidades que forman parte del proyecto, porque a decir de ellos, se les deja fuera de la toma de decisiones.

En una reunión realizada ayer en la planta baja de las oficinas de Senagua, las 12 regionales que asistieron, abordaron su estatuto para así poder conformarse como personería jurídica y pelear por la administración comunitaria del Pesillo Imbabura.

Proyección

Fernando de la Torre, dirigente (transitorio) del Pesillo Imbabura, sostuvo que desde el cinco de noviembre se ha pedido a la Mancomunidad que se de la administración Pública y Comunitaria. “No queremos hacernos dueños en las ciudades, pero si en nuestra jurisdicción queremos administrar. No queremos ser solo partícipes, queremos también ser parte de la toma de decisiones porque es nuestro proyecto”, agregó.

Se indicó que por parte de las regionales se buscará una reunión de trabajo con los representantes de la Mancomunidad, para que se reconozca los más de 24 años que las juntas de aguas han estado en la lucha por sacar a flote este proyecto. “Nos están quitando el derecho a nuestras tierras, a la administración del agua que nosotros hemos gestionado”, dijo De la Torre.

La propuesta de la administración público-comunitaria, se hará llegar a la Mancomunidad del Pesillo Imbabura, Banco de Desarrollo y la Agencia Francesa para el Desarrollo. “La Constitución del Estado nos ampara para poder ejercer este derecho”.

Más versiones

Ángel Campuéz, concejal de Cayambe, y delegado de la Regional Unopac, expuso que en la Fábrica Imbabura, hace años atrás se buscó estratégicamente dar la figura pública-comunitaria, pero no se la concretó, por lo que ahora lucharán para que la administración sea también comunitaria. “Apoyaremos a nuestras organizaciones, habrá divergencias, pero que el pensar diferente no nos haga enemigos”, resaltó.

Por su parte, Gustavo Yacelga, presidente de la Regional Sumayaku (Otavalo), dijo que se hará un solo frente para trabajar tanto con la Mancomunidad y las Regionales. “Pero para eso debemos ser legales, y con ello luchar para que la gestión también sea comunitaria. Así como dirigentes no solo queremos pedir sino también arrimar el hombro en la toma de decisiones”.

No impedirán trabajos

De acuerdo a de la Torre, se retoman los trabajos el 16 de diciembre y en 18 meses se busca terminar el anillo principal del anillo vial del Pesillo. Por otro lado, aclaró que no van a paralizar u obstaculizar los trabajos a desarrollarse durante los próximos meses. “Siempre vamos a estar de acuerdo que se ejecute a la brevedad posible; pero en la consultoría del modelo de gestión que va a demorar cerca de 8 meses, vamos a luchar para corregir este modelo que sea público-comunitaria”, concluyó. (FCDL)

Redacciòn IBARRA

De acuerdo a los términos de referencia del proyecto se indica que la administración y operación del Pesillo Imbabura sea a través de una empresa pública mancomunada con participación comunitaria, eso ha generado malestar a las comunidades que forman parte del proyecto, porque a decir de ellos, se les deja fuera de la toma de decisiones.

En una reunión realizada ayer en la planta baja de las oficinas de Senagua, las 12 regionales que asistieron, abordaron su estatuto para así poder conformarse como personería jurídica y pelear por la administración comunitaria del Pesillo Imbabura.

Proyección

Fernando de la Torre, dirigente (transitorio) del Pesillo Imbabura, sostuvo que desde el cinco de noviembre se ha pedido a la Mancomunidad que se de la administración Pública y Comunitaria. “No queremos hacernos dueños en las ciudades, pero si en nuestra jurisdicción queremos administrar. No queremos ser solo partícipes, queremos también ser parte de la toma de decisiones porque es nuestro proyecto”, agregó.

Se indicó que por parte de las regionales se buscará una reunión de trabajo con los representantes de la Mancomunidad, para que se reconozca los más de 24 años que las juntas de aguas han estado en la lucha por sacar a flote este proyecto. “Nos están quitando el derecho a nuestras tierras, a la administración del agua que nosotros hemos gestionado”, dijo De la Torre.

La propuesta de la administración público-comunitaria, se hará llegar a la Mancomunidad del Pesillo Imbabura, Banco de Desarrollo y la Agencia Francesa para el Desarrollo. “La Constitución del Estado nos ampara para poder ejercer este derecho”.

Más versiones

Ángel Campuéz, concejal de Cayambe, y delegado de la Regional Unopac, expuso que en la Fábrica Imbabura, hace años atrás se buscó estratégicamente dar la figura pública-comunitaria, pero no se la concretó, por lo que ahora lucharán para que la administración sea también comunitaria. “Apoyaremos a nuestras organizaciones, habrá divergencias, pero que el pensar diferente no nos haga enemigos”, resaltó.

Por su parte, Gustavo Yacelga, presidente de la Regional Sumayaku (Otavalo), dijo que se hará un solo frente para trabajar tanto con la Mancomunidad y las Regionales. “Pero para eso debemos ser legales, y con ello luchar para que la gestión también sea comunitaria. Así como dirigentes no solo queremos pedir sino también arrimar el hombro en la toma de decisiones”.

No impedirán trabajos

De acuerdo a de la Torre, se retoman los trabajos el 16 de diciembre y en 18 meses se busca terminar el anillo principal del anillo vial del Pesillo. Por otro lado, aclaró que no van a paralizar u obstaculizar los trabajos a desarrollarse durante los próximos meses. “Siempre vamos a estar de acuerdo que se ejecute a la brevedad posible; pero en la consultoría del modelo de gestión que va a demorar cerca de 8 meses, vamos a luchar para corregir este modelo que sea público-comunitaria”, concluyó. (FCDL)