Festival Internacional del Folklore

POR: Luis Fernando Revelo

Llegar a Ambato, es arribar a la ciudad jardín, a la ciudad de los tres juanes, a la ciudad que cual ave fénix de la mitología griega, supo levantarse del aciago terremoto de 1949, a la ciudad que sabe vivir la esencia de la ambateñidad que se traduce en solidaridad, hospitalidad, fraternidad, amicalidad. Es llegar a la ciudad que acaba de celebrar con plausible alborozo la edición 69 de la Fiesta de las Flores y de la Fruta, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la región andina.

En el marco de estas renombradas fiestas, se celebra un Festival Internacional folclórico, que a lo largo de 51 años ha tenido grandes connotaciones, pues se ha constituido en el balcón donde aparecen catalogados grupos de trayectoria dancística, que deleitan a los espectadores con lo más granado de sus tradiciones, costumbres y música que pone de relieve su identidad.

En esta ocasión se pudo admirar el talento y la creatividad de Kresala Dantza Taldea del país Vasco de España, Nusa Tenggara del Este de Indonesia, Ballet Folklórico Macuilxochitl de México, Ballet Folclórico Jacarandas de las Sabanilllas de Costa Rica, el Grupo de los Hermanos Yúgar de Boliva y, por supuesto, representando a nuestro Ecuador, el Grupo de Danzas Folklóricas Ñucanchi Llacta, que bajo la sapiente dirección de la Lic. Consuelo Terán de Suárez, demostró poder creador y su presencia apolínea en toda su belleza.

Una treintena de bailarines, con el acompañamiento musical del grupo Cantares de Cotacachi, dejaron en los escenarios una impronta indeleble, de magia y ritmo inefables, entregando lo imposible, con una pasión que se elevó hasta el cielo y se inclinó hasta ser seno sagrado de la tierra, para recibir la frenética ovación del público.

¡Enhorabuena!