La Virgen del Cisne, emblema de amor de los lojanos

ROMERÍA. Los inicios de la peregrinación de la Virgen del Cisne se remontan al año 1829, cuando el Libertador Simón Bolívar decretó su traslado anual a Loja.
ROMERÍA. Los inicios de la peregrinación de la Virgen del Cisne se remontan al año 1829, cuando el Libertador Simón Bolívar decretó su traslado anual a Loja.
ADVOCACIÓN. La presencia mariana de la Virgen del Cisne se ha hecho visible alrededor del mundo, por los millones de devotos que anualmente la visitan.
ADVOCACIÓN. La presencia mariana de la Virgen del Cisne se ha hecho visible alrededor del mundo, por los millones de devotos que anualmente la visitan.

La historia de la Virgen es un recorrido de amor y devoción. Su peregrinación es una de las más importantes de América.

La Virgen del Cisne tiene millones de fieles por todo el país y América, es impresionante el amor y respeto que despierta. El 28 de julio de 1829, Simón Bolívar Presidente de la Gran Colombia decretó que la imagen de la ‘Churonita’ salga anualmente a la ciudad de Loja.

La aparición de la Virgen del Cisne

Según el relato del estudio antropológico cultural hecho por el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), la Virgen del Cisne se aparece a los indígenas. Existen dos versiones.

“La una cuenta que salía todos los días a conducir sus rebaños una doncella indígena, inocente y humilde, a quien con frecuencia se le aparecía una hermosa pastorcilla coronada de rosas y aspecto resplandeciente. La pastorcilla siempre luciendo sencilla indumentaria, no era otra que la Virgen Santísima que acompañaba a la niña mientras cuidaba el ganado”, señala el documento del INPC.

Asimismo, el estudio antropológico señala que el 12 de octubre de 1594 fecha en que la parroquia El Cisne era azotada por una “gran sequía y plaga de ratas que destruyeron todos los sembríos consecuentemente se produjo una terrible hambruna que obligó a los indios a emigrar en busca de mejores tierras, por una parte, y, por otra huyeron de quienes trataban de imponerles la religión católica. Se hallaban los indios en esta determinación cuando se les apareció la Santísima Virgen y les dijo que fundasen allí una iglesia, pues Ella los habría de asistir para que no volviesen a tener hambre.

“Confiad en mí, porque os voy a ayudar y a proteger para que nunca más volváis a tener hambre. Aquí os quiero asistir. Levantar en este lugar un templo que allí estaré siempre con vosotros”, así habría sido la promesa de la Virgen María.

Los lugareños inmediatamente empezaron con la construcción del templo y las lluvias aparecieron, se reverdecieron los campos y la prosperidad los invadió.

Una hermosa historia

En Latinoamérica el nombre de María tiene un significado especial y una gran importancia histórica, religiosa y social.

El periodista e historiador lojano Jaime Celi Correa, considera necesario que los lojanos debemos comprender la magnitud del “fenómeno mariano de la advocación de la Virgen del Cisne, porque no se trata de una costumbre en el tiempo que cada vez va aglutinando a más romeriantes. Es importante analizar desde el punto de vista de la objetividad científica, es un fenómeno social colectivo y como tal está dentro de la investigación histórica”.

“La comunidad del Cisne, donde se ubica el Santuario, se llamó de los Ambocas, y, surge la inquietud, porque si la advocación nace en ese pueblo Paltas llamado Ambocas, por qué no se llamó la Virgen de Ambocas? Eso genera una hipótesis de que el nombre fue impuesto por el obispo Luis López de Solís que en 1596 estuvo en Loja”, argumenta Jaime Celi.

Según Jaime Celi, la advocación de la Virgen del Cisne en el contexto de evangelización juega un papel muy importante ya que es el concepto de madre, “que en la época de la colonia al indio le venía bien, frente a la inmensa y terrible explotación a la que fue sometido, entonces la iglesia le daba un consuelo”.

Asimismo, el periodista menciona que en el año 1830 se realiza la primera Feria de Loja con la presencia de la Virgen del Cisne. “Con esta oportunidad debemos saber que 100 años después, es decir en 1930 se cumplió la coronación canónica de la Virgen del Cisne, autorizada por Roma, en reconocimiento a la gran virtualidad que tiene esta advocación mariana”, menciona.

La escritora Teresa Mora de Valdivieso manifiesta que la Virgen del Cisne es el emblema religioso de la provincia de Loja. “La trajo desde Loja el obispo López de Solís que fue fundador de las Conceptas, la veneraban en la cordillera de Ambocas, nos dejó la advocación del Cisne, que existía en Alemania, luego pasó a Francia, Italia y España”.

La romería

Miles de personas caminan cada año desde la Basílica de El Cisne hasta San Pedro de la Bendita en un primer tramo de 25 kilómetros. El segundo tramo comprende San Pedro de la Bendita hasta Catamayo en un recorrido de 12 kilómetros. Desde el valle de Catamayo recorre 37 kilómetros hasta la Catedral de Loja.

En el libro ‘Caminando con Ella’ se relata que el “libertador Simón Bolívar para satisfacer el pedido de los devotos que residen distantes de El Cisne han solicitado la visita de la Madre de Jesús para rendirle homenaje por sus milagros”.

“Para satisfacer sus buenos deseos y sobre todo por el bien de los devotos que residen en la ciudad de Loja. El libertador Simón Bolívar el 28 de julio de 1829 decreta que la imagen de la histórica Virgen del Cisne anualmente salga a la ciudad de Loja”, dice la narración del documento titulado ‘Caminando con Ella’.

Teresa Mora de Valdivieso precisa que la peregrinación de la Virgen del Cisne es “un testimonio de amor y que la gran presencia de los devotos en la caminata, la hacen una de las más importantes del mundo”.

¿Qué significa para los lojanos la Virgen del Cisne?

Para el Padre Jimmy Arias Piedra, la ‘Churonita’ representa “la mujer dócil que supo fiarse de Dios sin entender cómo era posible que pueda concebir un hijo. La Madre que nos ama tanto, que es capaz de dejar que su único hijo muera en la cruz para que fuera nuestro salvador”.

“Para nosotros la advocación del Cisne es un símbolo de amor, es la Madre, le escribí la canción ‘Que Bella Eres’, ahora se canta en todo el mundo”, puntualiza Teresa Mora.

El párroco de Gonzanamá, Silvio Vega, considera que la Virgen del Cisne es aquella que evangeliza. ”Es nuestra intercesora que congrega a muchos fieles, por eso en la peregrinación nos damos cuenta de los testimonios de vida y de la devoción que nos ayuda a renovar la fe”.

El sacerdote Eduardo Delgado, párroco de Nuestra Señora de la Nube, emocionado menciona: “Es mi mamá del cielo que me cuida y me rodea de ternura en cada momento, ahora más como religioso, a Ella le debo mi vida, mi vocación, es mi Madre celestial la Siempre Virgen María, que ha estado presente cuando más la he necesitado. Soy feliz de tener una Madre llena de amor. Virgen María guarda en tu lindo corazón a todos los lojanos y devotos, Churonita llévanos de tus manos al encuentro con Jesús”. (EVLL)

Es mi mamá del cielo que me cuida y me rodea de ternura en cada momento, ahora más como religioso…”

Padre Eduardo Delgado

párroco de Nuestra Señora de la Nube