Talía Guerrero Aguirre
Las redes sociales son un fenómeno, gracias al poder de comunicación que la Internet facilita, los blogs y redes sociales como Snapchat, Twitter, YouTube, Instagram o el famoso Facebook etc. Sin embargo el uso incorrecto de estas, puede traer problemas graves a nuestros adolescentes y jóvenes, que generalmente creen en la existencia de un ser humano honesto al otro lado de la pantalla.
Un grupo de mujeres policías como parte de una capacitación, realizaron en un parque de la ciudad, frecuentado particularmente por jóvenes en su mayoría inmersos en su celular; el siguiente ejercicio vestidas de civiles; una de ellas se acercó a una muchacha y la saludo diciéndole “Como estas, tú te llamas María Pérez, respondió “ SI”, tu padre es Juan Pérez, “ SI” , como lo sabe yo no la conozco, prosiguió, estudias en el colegio Tal, tu hora de salida es a las 14:h30; María paralizada no comprendía, por lo que se sintió muy incómoda y preocupada; la extraña continuo, tus mejores amigas son Sofía y Julia, “SI”, y tu estas aquí esperando a Juan, “ SI”; pero explíqueme porque sabe todo de mí; la respuesta fue simple, resulta que Juan soy Yo y con esto quiero demostrarte lo peligroso que puede ser para ti, confiar en los personajes imaginarios que conoces en las redes”. Una psicóloga educativa considera así mismo, que la consecuencia del uso prematuro de redes sociales, puede ocasionar la pérdida de identidad de los niños y jóvenes, puesto que tienden a mostrar personalidades inexistentes.
Quisiera creer que no estoy sola con esta preocupación ni con la certeza además de que no podemos evitarlo, porque la tecnología aporta también en el crecimiento de nuestros hijos o nietos, pero sí estoy convencida de que podemos prevenirlos de alguna manera, sobre el peligro del Grooming, Sexting o el Ciberbullying, que son ocasionados porque el ciberespacio es utilizado por todo tipo de usuarios, que en la vida real definitivamente no son sus amigos.
La recomendación para padres o abuelos, es dar prioridad a la comunicación y estar siempre ahí para ellos. (O)